La presidenta del Partido Acción Nacional (PAN), Cecilia Romero Castillo, acusó al gobierno federal de ‘‘contaminar’’ la negociación de la ley secundaria en materia energética, porque el director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, filtró el nombre de Mario Alberto Ávila Lizárraga como el primer funcionario del sexenio pasado que benefició a la empresa Oceanografía.

Entrevistada tras reunirse con el grupo parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados, Romero, panista consentida en el gobierno de Vicente Fox, que presumía tener una amistad cercana con el ex mandatario, y también beneficiaria de posiciones en el gobierno con Felipe Calderón, condicionó la discusión y debate de la reforma energética a la resolución del tema Oceanografía: ‘‘Yo creo que es posible que se aclaren los temas básicos del problema de Oceanografía y puede continuar el análisis de la reforma energética solucionándose esta cuestión conflictiva. Aquí que quede muy claro: no solamente Acción Nacional no teme, sino que exige se lleve a fondo la investigación de cualquier irregularidad que haya habido en esta empresa’’.

Romero Castillo, quien recientemente sustituyó en la presidencia panista a Gustavo Madero, pretendió evadir la responsabilidad administrativa y penal en que pudieran haber incurrido los gobiernos panistas en sus tratos con la empresa Oceanografía, porque ‘‘los datos fundamentales, formales de delito que pudieron haberse cometido se presentaron en el año 2013 (primero de la administración de Enrique Peña Nieto) y hay que aclararlo’’.

La argumentación de la presidenta del blanquiazul consideró que los temas de la reforma energética y Oceanografía transitan en paralelo, pero dada su condición y naturaleza, convergen. Desglosó así su visión sobre dicho encuentro de ambas situaciones:

‘‘Si los problemas que se han detectado en Oceanografía inciden, influyen en el asunto de Pemex y la reforma energética de manera definitiva, se tiene que ir esclareciendo el camino, pero no es un toma y daca, no es una situación de pleito, es una necesidad de esclarecimiento en su momento.’’

Consideró que la filtración del nombre de Mario Ávila, panista involucrado en actos de corrupción con la empresa Oceanografía, sí contamina la negociación de la reforma energética. Y para aminorar el efecto que ha provocado el involucramiento de su partido en actos ilegales, a través del caso Ávila, demandó que se respete el debido proceso en torno a ese tema.

Por su parte, el coordinador de la fracción parlamentaria del PRI en San Lázaro, Manlio Fabio Beltrones, consideró que el PAN, con su ‘‘enorme madurez, podrá llegar a conclusiones que nos permitan entender que la reforma energética no se puede detener, porque va en perjuicio del país. En México se necesita de más inversión, empleo y modernidad’’, afirmó.

El político sonorense señaló que al parejo de la reforma energética se pueden mantener las investigaciones necesarias (en torno al caso de Oceanografía) para que si existen delitos ‘‘se evite que tengamos impunidad y se castigue a los que pueden ser culpables, pero se proteja a todos los inocentes’’.

–¿No representa esta situación una oportunidad que el PAN busca para pedir otras cosas en torno a la reforma energética? –se le preguntó.

–Confío en que no. Y lo hago siempre pensando en que el Partido Acción Nacional es un partido sumamente maduro que sabrá distinguir qué es lo que le beneficia a México y qué es lo necesario que debemos tener materia de justicia. Nos trae enormes beneficios que la justicia florezca; que se castigue a los culpables y no se lastime a inocentes.