Martes 11 de marzo de 2014, p. 7
Saltillo, Coah., 10 de marzo.
Si bien la muerte de Heriberto Lazcano, El Lazca, en el municipio de Progreso, Coahuila, quedó confirmada por servicios periciales, la duda permanente sobre su fallecimiento no se va a despejar hasta que aparezca el cadáver, consideró el gobernador Rubén Moreira Valdez.
Aun cuando el cuerpo de quien fue líder de Los Zetas no apareció tras ser sustraído por sujetos armados de una agencia funeraria en el mismo municipio de la región carbonífera donde fue abatido por infantes de Marina, el 7 de octubre de 2012, hay pruebas periciales que confirman su identidad, dijo el mandatario.
Entrevistado sobre la polémica por la muerte de Nazario Moreno, El Chayo, quien presuntamente había sido abatido en el gobierno de Felipe Calderón, Moreira consideró que el fallecimiento de Lazcano se confirmó a través de los protocolos legales.
‘‘Yo no soy quien para confirmar ni para no confirmar; lo que le puedo decir es que en el caso de Heriberto Lazcano hay fotografías de un cadáver que, según los peritos, correspondía a esa persona; hubo una autopsia o un servicio forense y ahí se recogieron huellas’’.