A pesar de los avances que han tenido las trabajadoras en el mercado laboral mexicano, persisten prácticas ilegales como el despido por embarazo, la petición de pruebas de no ingravidez para contratarlas y los salarios desiguales, entre otros, denunciaron organizaciones laborales.

La Unión Nacional de Trabajadores (UNT) indicó que hay muchas tareas pendientes en el renglón de justicia laboral para las mujeres y que la defensa de los derechos laborales de las trabajadoras es un tema que requerirá del concurso de los gremios.

Esta organización indicó que actualmente tanto trabajadores como trabajadoras están viendo socavados sus derechos laborales y prestaciones. Sin embargo, a las mujeres mexicanas les están escamoteando condiciones laborales que habían conseguido, como licencias maternales, permisos para la atención de hijos enfermos, entre otras.

Ellas son menos contratadas o se les bajan prestaciones

Información de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, que preside Margarita Marlene Rojas Olvera, señala que aun cuando se han dado avances legales en los derechos de las mujeres trabajadoras, las demandas y juicios que se presentan en esta instancia hablan de que persiste la vulneración de derechos de este sector, como son acoso laboral, discriminación por embarazo, limitación del derecho al trabajo de las madres solteras y salario desigual.

No obstante que ha mejorado la preparación académica de las mujeres, son menos contratadas, se les paga menos o se les piden pruebas de embarazo o se les bajan prestaciones, planteó.

Por el lado de las servidoras públicas, el sindicato del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) señaló ha emprendido una amplia lucha para rescatar prestaciones que históricamente tenían las mujeres, como pago de canastilla y permisos para atender hijos enfermos.

El dirigente del gremio, Luis Miguel Victoria Ranfla, expuso que también se ha elevado la participación de las mujeres en el sector público: en el Issste, de una plantilla de 76 mil 800 trabajadores, 63 por ciento son mujeres; de 22 mil 862 personas del área de enfermería, 90 por ciento son mujeres; en los servicios médicos de odontología 48 por ciento son doctoras.

En medicina general, 52 por ciento son doctoras y en estancias infantiles 80 por ciento del personal es de sexo femenino.