El cantante y compositor cubano Silvio Rodríguez aclaró ayer que él no ha sostenido ningún tipo de intercambio con Rubén Blades, sobre la polémica con el presidente venezolano Nicolás Maduro. De Hugo Chávez, dijo: Es una pena que ya no esté con nosotros. Lo conocí personalmente. Se me subió a un concierto una vez en Caracas. Empezó a recitar poemas maravillosos sobre Simón Bolívar. Inolvidable. Tengo la mejor opinión que se puede tener sobre un ser humano respecto de Chávez.

En conferencia de prensa en el vestíbulo del Auditorio Nacional, donde se presentará el domingo 9 y el lunes 10 de marzo, informó de la gira que realizará por la República Mexicana.

De Paco de Lucía: Lo conocí a fines de 1977, en casa de Félix Grande, un poeta también extraordinario y que se fue en enero. Paco y yo no nos veíamos a menudo, pero cuando lo hacíamos era una fiesta. Al primer programa de televisión de Paco en Cuba lo llevé yo. Después nos vimos en todas partes (...) Lo que se pierde es uno de los hombres que cambió el mundo de la guitarra.

Sobre lo que está pasando en Cuba, señaló: Es una rectificación. Ya desde antes nos habíamos dado cuenta de que había cosas que no andaban como debían de andar. Quizás reaccionamos un poquito tarde, para mi opinión personal. Esto no sólo lo digo aquí, sino que lo he dicho en Cuba muchas veces. Yo tengo esperanza de que las cosas que se están haciendo funcionen. Al menos algunas. Todas las que son imbuidas por una nueva forma de pensar, a esas les tengo más fe, que a las que tratan de arañar resquicios de nuestro pueblo... todo eso me parece que se va a ir al diablo. Las cosas que consiguió la revolución para la gente, que son los niveles de educación, que se mantienen a sangre y fuego, y los niveles de salud pública, que se mantienen también a sangre y fuego, son justos. A maestros y médicos les corresponde darles lo que se merecen, una retribución justa.

El trovador cubano durante la conferencia que ofreció ayer en el vestíbulo del Auditorio NacionalFoto Roberto García Ortiz

Del los conciertos, dijo: “Lo que vamos a tocar son canciones de amor. Todo gira alrededor de una tetralogía que compuse en la década del setenta. Cuatro canciones giran alrededor de la misma persona; es como una gran suite de desamor, y se llama Exposición de mujer con sombrero; las otras tres son prácticamente desconocidas. Esa es la mitad del concierto. El resto son las canciones que debemos tocar en todas partes. Hay dos piezas que tienen que ver mucho con México. Una la compuse antes de venir acá por primera vez, en 1971. Giraba en torno de un mito náhuatl, o mexica, que es Mariposas. De Santiago Feliú... lo conocí desde niño; lo vi crecer. Es tremendo lo que se perdió en cuanto a la música y al arte, en la trova. Su legado no se muere.”