Juchitan, Oax., 4 de marzo.

Beneficiarios del programa federal de vivienda rural para el Istmo de Tehuantepec acusaron a los priístas Samuel Gurrión Matías y Sofía Castro Ríos de tratar de adueñarse de 120 millones de pesos que corresponden a 2 mil indígenas zapotecos y huaves.

Los inconformes señalaron que a principios de este año entregaron documentos para obtener apoyo del programa, impulsado por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y el Fideicomiso Fondo de Habitaciones Populares (Fonhapo).

Recordaron que a mediados de febrero les informaron que habían sido liberados 160 millones de pesos deal programa y que se entregarían en las oficinas de la delegación de la Sedatu en Oaxaca, encabezada por la priísta Sofía Castro.

Añadieron que acudieron a las oficinas de la Sedatu, en la capital de Oaxaca, para recibir cada uno un cheque de 80 mil pesos, pero al llegar el diputado federal oaxaqueño Samuel Gurrión Matías, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y Castro Ríos les informaron que debían entregarles 50 por ciento de los apoyos, a lo cual se negaron y regresaron a Juchitán.

Eliseo Martínez Bello, asesor de los inconformes, informó que en una segunda reunión los priístas le exigieron que firmara la lista de beneficiarios y le ofrecieron dinero. Como se negó, los funcionarios le dijeron molestos que ahora cada uno debía entregarles 60 mil pesos.

Controle a sus empleados, exigen a Camacho Quiroz

No es justo que los políticos corruptos, empleados del gobierno y del PRI, quieran rasurar este apoyo federal. Los cheques ya están liberados, ya los tiene Sofía Castro, pero a cambio quieren 120 millones de pesos que corresponden a 2 mil ciudadanos, y a nosotros darnos únicamente 40 millones de pesos.

Martínez Bello detalló que los recursos esrtán destinados a zapotecas y huaves de los municipios de Juchitán, San Dionisio del Mar, Unión Hidalgo, Ixtaltepec, Ixhuatán y Chahuites.

Virginia Luis Aquino, beneficiaria del programa, exigió al gobierno federal frenar a los priístas oaxaqueños. No vamos a permitir que el diputado federal Sammy Gurrión nos quiera quitar nuestro apoyo. Al igual que Sofía Castro, ellos son unos vividores. Exigimos al presidente nacional del PRI, César Camacho Quiroz, que controle a sus empleados, porque ellos tienen esos puestos gracias al pueblo y ahora están abusando de nosotros, dijo.