La investigadora María del Rocío González disertó sobre el escritor en la feria de Minería
una capacidad naturalpara hablar de la libertad
Sábado 1º de marzo de 2014, p. 6
Una de las principales virtudes de la literatura de José María Chema Pérez Gay (1944-2013) es su inusual capacidad de hurgar en la condición humana
, sostuvo el jueves la investigadora María del Rocío González Serrano durante una conferencia en homenaje al escritor, diplomático y académico efectuada en la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería.
Si algo llama mi atención de Pérez Gay es esa capacidad tan natural para hablar sobre la libertad del ser humano y el libre albedrío, donde parece que no tenemos opción de elegir. Tiene, además, una enorme capacidad para urdir en sus personajes, los mira como si fuera un sicólogo
, destacó.
En su disertación, la especialista del Centro de Estudios Literarios del Instituto de Investigaciones Filológicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, indicó que otro de los rasgos del quehacer literario de quien fue colaborador de La Jornada es que volvió a los narradores de antaño, como Thomas Mann, en el sentido de lo que es la gran novela.
Señaló que entre los aportes de Pérez Gay está su faceta de traductor y divulgador de algunos de los grandes clásicos de la literatura en lengua alemana.
González Serrano también se refirió al quehacer de Pérez Gay como promotor y gestor cultural, desde el cual fue un innovador en México al fundar y dirigir Canal 22, además de su importante gestión como subdirector de Radio Educación.
Leyó un fragmento de la novela La difícil costumbre de estar lejos, de Pérez Gay, a la cual definió como un compendio de historia, sociología y sicoanálisis.
La integrante del proyecto del Diccionario de Escritores Mexicanos del mencionado centro de estudios universitarios, que este año publicará un dvd con los primeros cuatro tomos actualizados de esa obra, cerró su participación reconociendo la condición diplomática de Pérez Gay, cuyo ejercicio le permitió no sólo desempeñar su trabajo en el Servicio Exterior Mexicano. También le fue muy útil en su quehacer de narrador, pues es un autor muy irónico y sarcástico, pero también elegante y sutil, complementó.