Son las hijas del hospital siquiátrico infantil Juan N Navarro
Según los expedientes de las niñas
, todas fueron abandonadas
Viernes 28 de febrero de 2014, p. 38
Son 13 mujeres que fueron abandonadas desde pequeñas; sin familia, sin nombre. Permanecieron sin identidad legal cerca de 40 años. Algunas fueron encontradas en las salas de espera de hospitales, otras llegaron de instituciones siquiátricas, hoy todas tienen nombre y los mismo apellidos Navarro Rodríguez, en reconocimiento a los hospitales que las albergaron desde niñas.
La última generación de mujeres, que por abandono llegó al hospital siquiátrico Doctor Juan N Navarro, especializado en niños, sigue siendo tratada como de infante, pese a que ya son adultas mayores de 40 años.
Según los expedientes de las niñas
, en todos los casos la familia se desentedió de ellas, a una la llevaron a consulta, mientras los médicos hacían la revisión sus padres huyeron del hospital y nunca regresaron, otras deambulaban en la sala de espera de algún hospital.
Las edades de su ingreso al nosocomio varian: tres años la más pequeña y 16 la mayor, en realidad son estimaciones que hicieron los médicos por la carencia de registros de nacimiento.
La falta de documentos no sólo fue un tema de identidad, las limitó para que pudieran acceder a otros servicios, tanto de salud como de programas sociales. Sin embargo, luego de una larga búsqueda para obtener su documentación, por conducto del Registro Civil de la ciudad se logró ingresarlas al programa de registros extemporáneos en pro del derecho a la identidad que realiza el Gobierno del Distrito Federal (GDF) a grupos vulnerables.
Ayer, las 13 mujeres fueron formalmente registradas, alguna se cambió el nombre, otras siguieron con el de pila: Ana, Angélica, Bonifacia, Claudia, Cristina, Flor, Guadalupe, Lourdes, Magdalena, Marili, Mireya, Paulina y Sandra, todas con los apellidos Navarro Rodríguez, el primero en honor al médico Juan Nepomuceno Navarro, que es como se llama el hospital donde se encuentran y el segundo fue por la doctora Mathilde Rodríguez Cabo, quien creó el primer nosocomio para niños.
Puertas abiertas
Todas las pacientes eran expósitas y fue decisión de los médicos que llevaran los referidos apellidos, por lo que ahora, además de hermanas, son hijas del hospital siquiátrico infantil Juan N Navarro
.
El consejero jurídico del Gobierno del Distrito Federal José Ramón Amieva Gálvez, entregó las actas de nacimiento a las pacientes adultas del siquiátrico infantil, y señaló que al darles un nombre y nacionalidad se les abre la puerta para que obtengan atención en otras instituciones y puedan acceder a otros beneficios.
En el registro estuvieron presentes la directora de dicho nosocomio, María Pérez Ordaz, y el director general del Registro Civil, Héctor Maldonado San Germán.