Como boxeadora, Ana María Torres abrió el camino para el pugilismo femenil, ganó títulos mundiales, es la única mujer con el cinturón de diamante del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y conquistó el apodo de Guerrera por sus emotivos combates. Sin embargo, después de organizar dos funciones, define: Es más difícil ser promotora que pugilista.

Torres presentará este sábado, en Tres Marías, Morelos, su segunda función como promotora. Lo que más le ha costado, dice, es andar tocando puertas para conseguir patrocinios y para arreglar todo lo relativo al evento.

El nombre me ha abierto puertas, pero es más complicado de lo que pensé, indica la mexiquense, quien cuenta con el apoyo económico de su esposo, Cristóbal Mora, y del promotor Aquiles Torres, quien la ha asesorado, entre otras aspectos, con la transmisión televisiva en Cadena Tres.

Es muy caro hacer boxeo, pero me gusta y es una satisfacción ser la primera mujer a nivel nacional, tal vez mundial, en desempeñarme como promotora luego de haber sido campeona del orbe, señala.

En la primera función, realizada el pasado 27 de diciembre, no ganamos nada, algo que vislumbra será similar este sábado y en general en su inicio en esta faceta.

A lo mejor más adelante sí hay ganancias, pero por ahora me interesa no perder, dice sin querer profundizar en cantidades.

Lo primero que busco en mis funciones es no quedar a deberles a los peleadores, dice, y menciona que además de garantizarles la bolsa, a los pugilistas de sus gimnasios (Neza y colonia Doctores) no les cobra porcentajes ni gastos de entrenamiento: Su sueldo es libre de eso... de por sí ganan poco.

Como promotora no estoy maleada. La verdad hago las cosas de buena fe, por eso iré despacio, tratando de aprender. Lo que estoy haciendo es adaptarme a las reglas de la Comisión de Boxeo, y busca pactar peleas niveladas para que no suceda algo trágico.

Además, a sus pugilistas les exige estar en el límite de su división una semana y media antes de las contiendas. Si no están en peso, salen de la cartelera, dice, consciente de que muchos accidentes se deben a que obligan a los pugilistas a bajar varios kilos en poco tiempo.

Sobre su carrera, insiste en que regresará en busca de una buena despedida. Considera su retorno a mediados de año y planea la tercera pelea ante Jackie Nava, la cuarta ante Mariana Juárez y tal vez dar una oportunidad a Zulina Muñoz.