Roma, 24 de febrero.

El arresto del narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán merece toda la atención, porque el personaje tiene más peso que un ministro o hasta que un gobierno, opinó hoy el escritor italiano Roberto Saviano.

La economía italiana más prolífica es la criminal, el capítulo más importante de esta economía es el narcotráfico, el capo mexicano arrestado es un líder del tráfico de drogas incluso en Europa, por lo que entonces es también un líder de la economía italiana, escribió.

En un amplio artículo publicado por el diario La Repubblica, Saviano advirtió que los gobiernos europeos no se ocupan de los cárteles de México y ello podría suceder hasta que “sean los cárteles mexicanos los que se ocupen de Europa”.

Resaltó que Guzmán Loera es el capo del cártel de Sinaloa el grupo criminal-industrial mexicano que ha revolucionado el mundo de la cocaína.

El escritor, que en su libro Cero, Cero, Cero reconstruyó el mundo del tráfico de cocaína, confirmó que desde hace años se ha interesado en seguir toda la información sobre El Chapo, quien llegó a convertirse en el más poderoso de los líderes de la droga.

“El Chapo ha tenido una visión clara de su tiempo: que en el mundo occidental los derechos entran en contradicción con el mercado, por lo que comprendió que los países occidentales necesitan territorios sin ley, sin derecho”, anotó.

“En el mundo internacional del narcotráfico, El Chapo tiene la autoridad mística del Papa, obtenida con una campaña de consenso social que lo ha hecho autorizado como (Barack) Obama y ha tenido la genialidad en detectar nuevos territorios de mercado que lo han transformado en el Steve Jobs de la coca”, agregó.

Según Saviano, también comprendió que la democracia significa corrupción, que todos son corruptibles y que solamente es necesario encontrar su punto de ruptura.

Opinó que para estructurar su red criminal, el mexicano ha usado el modelo italiano, el más eficaz en el mundo en el tema de las mafias.

Es decir, explicó, siguiendo la tradición de las familias calabresas, campanas y sicilianas creó un grupo de confianza de parientes y gente de la sierra que conoce bien, con consejeros y reclutando sicarios entre ex militares capaces de usar armas poderosas, además de seriedad, profesionalismo y eficiencia.

Tras reconstruir la historia criminal de El Chapo y los momentos de su arresto, Saviano opinó que quizá el narcotraficante se dejó capturar antes de ser asesinado o que simplemente los suyos lo vendieron a los agentes.