Cancún, QR, 23 de febrero.

Atlante y Puebla demostraron el porqué están entre los colistas: empataron sin goles en un partido tedioso e insulso que cerró el telón de la octava fecha. Ambos, con problemas de descenso, se contentaron con un punto, ya que Veracruz y Atlas, los otros involucrados en la lucha, perdieron sus respectivos choques.

Luego del juego disputado en el estadio Andrés Quintana Roo, los azulgranas llegaron a nueve unidades y los camoteros a siete, cada vez más lejanos de la zona de clasificación.

La presión y el nerviosismo se instalaron muy pronto entre los equipos, que privilegiaron el juego defensivo y hubo poco para el recuerdo en la primera parte. Una llegada de Carlos Sánchez, del Puebla, estuvo entre lo más interesante.

Los locales, con un ataque chato, recurrieron a los tiros de larga distancia, pero cuando no resultaron flojos o directos al guardameta Jorge Villalpando, fueron demasiado desviados.

Al minuto 36, Mauricio Romero remató de cabeza, pero su envío pasó por encima.

Muy pocas emociones

El segundo tiempo regaló un poco de emoción al comienzo, cuando Gael Acosta, recién ingresado en lugar de Alejandro Vela, hizo un veloz recorrido por la izquierda y sacó un centro que conectó Luis Rodríguez, pero el esférico se fue a un costado.

El espectáculo, de por sí gris, menguó más ante las constantes faltas que marcó el silbante Roberto García Orozco, con las que restaba fluidez. No tardaron en aparecer las rechiflas ante el mezquino juego.

Al minuto 70 el timonel visitante Rubén Omar Romano ingresó al refuerzo brasileño Maicon dos Santos y sacó a Matías Alustiza. Redondeó sus cambios con la entrada de Alan Zamora en lugar de DaMarcus Beasley.

Pero ni Potros ni el cuadro de la franja conseguían hilvanar más de tres pases; el pelotazo al área era un recurso inútil, fácil de controlar para los defensores.

La recta final se disputó a ritmo semilento; los jugadores deambulaban en el campo agobiados por el clima caluroso. Los visitantes consumieron tiempo a la menor oportunidad: un saque de banda, un despeje de meta o una falta.

A dos minutos del final, los Potros buscaron el gol del triunfo; sin embargo, en una descolgada comandada por Carlos Sánchez, los visitantes tuvieron una buena oportunidad; el uruguayo dio centro retrasado a Maicon, quien defraudó al perder fácilmente el esférico.