Sochi, 11 de febrero.

La temperatura siguió en ascenso este martes en Sochi, sede de los Juegos Olímpicos de Invierno, lo que ha provocado el reblandecimiento de la nieve y la dificultad para deslizarse sobre ella, lo cual expone a los competidores. A pesar del invierno caluroso los eventos seguirán según la programación prevista, indicaron los organizadores.

Existe preocupación respecto del estado del tiempo en los Juegos Olímpicos dado que el balneario turístico de Sochi, en el mar Negro, es conocido por su clima subtropical.

Las temperaturas subieron este martes hasta los 12 grados centígrados al nivel del mar, donde se desarrollan los deportes de estadio, y hasta 5 grados en la zona de montaña, donde se disputan los deportes de esquí alpino y nórdico.

Hacía mucho frío anoche y hay un poco de calor ahora, lo que ha causado uno o dos problemas, dijo el portavoz del Comité Olímpico Internacional, Mark Adams.

Pero el plan sigue su programación y la Federación Internacional de Esquí está acostumbrada a esto, indicó. Hay mucha nieve, sólo hace un poco de calor. Los próximos días hará un poco de calor, pero será llevadero, agregó.

Algunos competidores expresaron su temor por el efecto de las condiciones climáticas en el espectacular evento de halfpipe en snowboard.

Adams señaló que no habrá problema con el halfpipe, pero admitió que como siempre pasa con los deportes de nieve, cuando hay un poco de calor es un poco más difícil la prueba.

Organizar unos Juegos Olímpicos de Invierno en condiciones de un relativo calor se ha convertido en algo casi usual en los últimos años. En los de Vancouver 2010, por ejemplo, se trajeron grandes cantidades de nieve en camiones para tener la adecuada superficie. Rusia también almacenó decenas de toneladas de metros cúbicos de nieve en previsión de temperaturas calurosas.

La portavoz de Sochi 2014, Alexandra Kosterina, señaló que los organizadores están confiados de que no habrá problemas. Tenemos un fuerte contingente preparado con reservas de nieve de la pasada temporada, explicó, añadiendo que el plan de poner la nieve ya había sido probado en justas que contaron con temperaturas calurosas.

Con la nieve más blanda debido al calor, se han producido muchas caídas. El martes, durante el sprint de esquí de fondo, la ucraniana Marina Lisogor se echó a llorar, tras perder el equilibrio.

En el trampolín de RusSki Gorki las pruebas de combinada nórdica se ven amenazadas.

Es barro y es difícil esquiar así, lanzó el estadunidense Bill Demong, campeón olímpico en el gran trampolín en 2010 en Vancouver. La nieve no está estructurada y el que flote mejor ganará, añadió.

La lectura del clima y la nieve es mucho más crítica entre los competidores y entrenadores que se han expresado molestos de las instalaciones del Rosa Khutor Extreme Park, donde se celebran las pruebas de esquí artístico, por su peligrosidad, tras una nueva serie de espectaculares caídas en el slopestyle femenino, celebrado este martes.

La canadiense Kaya Turski, principal candidata al primer oro olímpico de esta disciplina, que debuta en Sochi en el programa, se cayó dos veces y quedó fuera de la final. Peor aún le fue a su compatriota Yuki Tsubota, quien abandonó la pista en camilla.

El noruego Torsten Horgmo se rompió la clavícula tras una caída en los entrenamientos previos.

Otra prueba afectada fue el descenso femenino, cuyos entrenamientos fueron cancelados hoy porque la nieve estaba demasiado blanda.