Lunes 10 de febrero de 2014, p. 29
Pensar en un ritmo de crecimiento mucho más alto y mayores niveles de empleo y bienestar, es hasta ahora un buen deseo mientras no se aprueben las leyes secundarias y se corrija el desequilibrio fiscal, sostuvo el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp).
Dijo que pese a que la calificadora de riesgo Moody’s elevó la nota de México, las reformas estructurales comenzarán a mostrar resultados hasta 2015 y sólo entonces se podrá corroborar si lo que se aprueba como leyes secundarias fue lo necesario para que el país se consolide como atractivo para la inversión.
De lo contrario, sólo habrá que seguir creciendo inercialmente y volver a los niveles de calificación equivalentes a ese entorno
, consideró.
En su análisis semanal, sostuvo que el aumento de la calificación de nuestro país es una buena señal, sobre todo en un contexto en el que recientemente los mercados emergentes han tenido algunas complicaciones.