Al rendir protesta como rector de la unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Octavio Nateras Domínguez señaló la necesidad de discutir una renovación generacional en la plantilla académica y de brindar a los alumnos mejores condiciones para su permanencia en las universidades.

En una ceremonia que fue interrumpida por gritos de una docena de jóvenes que le dijeron corrupto, “palero” y no nos representas, consignas que los demás asistentes a la ceremonia intentaron silenciar con aplausos, Nateras Domínguez asumió el cargo de rector de esa unidad para el periodo 2014-2018.

El primer egresado de la UAM Iztapalapa en llegar a la rectoría de la institución, señaló que si bien la investigación es una de las cualidades más relevantes de esta casa de estudios, habrá que reconocer que, en buena medida, derivado del aumento de edad de nuestra planta de profesores-investigadores, el ritmo de producción está adquiriendo otra velocidad.

Destacó que por ello es necesario generar condiciones de recambio (generacional), pero también de infraestructura que nos permitan desarrollar nuevas líneas de investigación, convirtiendo los conocimientos generados en la UAM Iztapalapa en una llave para la obtención de recursos.

Señaló que es necesario discutir cuestiones que en este momento traban el desarrollo de la institución: el recambio generacional de la planta académica y la búsqueda de un programa de retiro digno; la carrera académica en todos sus aspectos; la educación a distancia o semipresencial, y la incorporación de las tecnologías de la información como herramientas para incrementar la cobertura y la oferta educativas.

Ante el rector general de la UAM, Salvador Vega y León, miembros de la Junta Directiva y también el rector saliente de la unidad Iztapalapa, Javier Velázquez Moctezuma, el nuevo directivo sostuvo que si bien su visión tiende a ser de un optimismo realista, no desconoce la problemática que enfrenta.

En términos de docencia subrayó que es necesario atender tres cuestiones: dirigir la atención hacia las instituciones de educación media superior para intervenir en ellas y tener la posibilidad de incidir en la formación de los alumnos que serán estudiantes de las universidades; atender con más y mejores becas a los alumnos para incentivarlos a no desertar de la educación superior, y fortalecer el área de posgrado de la Universidad Autónoma Metropolitana.