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No todo está perdido; hay que buscar la reunificación de las izquierdas, asegura

Solalinde: “el PRD traicionó al pueblo, le dio la espalda, pactó, se aprianizó
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Arturo Núñez, Silvano Aureoles, Luis Sánchez y Alejandro Solalinde en la reunión de senadoresFoto María Luisa Severiano
 
Periódico La Jornada
Martes 28 de enero de 2014, p. 16

Durante la inauguración de la reunión plenaria de los senadores perredistas, el sacerdote Alejandro Solalinde acusó: “vaya paquetito que tienen ustedes, porque nuestras izquierdas se dividieron, y el PRD traicionó al pueblo, le dio la espalda, pactó, se aprianizó”.

Ahí, en uno de los salones del hotel Four Seasons, donde los senadores del PRD reunieron a los representantes de las corrientes de su partido y de las fuerzas progresistas, Solalinde, con su breve mensaje, enmudeció a los perredistas.

Ante el presidente nacional de ese partido, Jesús Zambrano, de la mayoría de los integrantes de ese grupo parlamentario, del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, de investigadores, académicos y políticos invitados, prosiguió: pero nunca es tarde, tenemos que buscar la reunificación de las izquierdas. No se ha perdido todo, pero tenemos que ser muy honestos y tienen que reconocer que se equivocaron, que cayeron en la corrupción, pero nunca más volver a eso.

Todavía es tiempo, insistió el religioso; hay una fuerza muy grande, obvio con Morena (Movimiento Regeneración Nacional), que ha sido honesto.

El coordinador de los senadores del PRD, Miguel Barbosa, convocó a generar una gran movilización, una insurgencia social, no una insurgencia revolucionaria, que no se confunda con acciones violentas. Vamos a luchar con todos los elementos a nuestro alcance para que se realice la consulta para que los mexicanos sean tomados en cuenta en el destino del patrimonio de la nación.

Precisó el legislador perredista: esa es la insurgencia social que queremos promover, y la primera expresión tendrá que ser la consulta popular. El ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas encabeza para nosotros ese movimiento y buscaremos a Andrés Manuel López Obrador. No esperábamos una respuesta fácil, pronta. Tenemos que hacer diplomacia política; nos unen propósitos de la defensa del patrimonio de la nación.

Agradeció la presencia de Cárdenas, de Ifigenia Martínez, de Teresa Juárez viuda de Castillo, y de todos los presentes. Ahí estaban Porfirio Muñoz Ledo, Rogelio Ramírez de la O, Francisco Javier Carrillo, René Drucker, el actor Ernesto Gómez Cruz, María Rojo, Raúl Álvarez Garín –a quien recibieron con una gran ovación– y Virgilio Caballero, además de académicos e investigadores.

Cárdenas, por su parte, destacó en su mensaje: “Esta convocatoria nos deja ver que podemos tener un trabajo que va más allá del PRD, que va más allá de las fracciones parlamentarias, para lo mucho que tenemos por delante en esta lucha por la defensa de nuestro petróleo, de nuestros recursos.

Queda claro que las luchas para revertir las reformas entreguistas, las reformas constitucionales de carácter neoliberal, nos dejan ver que serán de mediano y largo plazo, y al final de cuentas acaban por resolverse en favor de la nación.

El ex candidato presidencial destacó que habrá que buscar la lucha en las movilizaciones populares, en la toma de conciencia del mayor número posible de mexicanos, por las vías que marca la Constitución, para poder echar abajo estas reformas.

Zambrano, serio, al hacer uso de la palabra, eludió responder a Solainde. Dijo que el tema que impulsarán es el de la consulta popular, para que en 2015 ganemos y se reviertan las reformas en materia energética. Además apostamos por la unidad de las izquierdas, del más amplio espectro de las fuerzas democráticas.

Posteriormente, en conferencia de prensa, a pregunta expresa, refirió: la opinión del padre Solalinde es muy respetable; viene a expresar un punto de vista a la casa hoy hecha como tal del PRD aquí, pero no comparto desde luego su consideración. El partido nunca le ha dado la espalda al pueblo, a la nación.

Aseveró: como presidente del PRD, no tengo interés ni aspiración a seguir en la dirigencia. Si la dirección nacional acuerda otra cosa, pues yo la acataré, pero yo no abogaré por la prórroga de un día más.