El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) requiere nueva infraestructura, pero por ahora los recursos económicos se centran en renovar las clínicas y hospitales que todavía son útiles, donde ya se realizan 470 obras. El objetivo es mejorar la calidad de los servicios, sobre todo ahora que el organismo obtuvo incremento de 23 por ciento real en su presupuesto para 2014, dijo su director Sebastián Lerdo de Tejada.

Se acabaron los pretextos para no cumplir con la vocación social del instituto, apuntó. Con el presupuesto de 205 mil millones de pesos aprobado por los diputados, para el próximo año, se garantiza el abasto de medicamentos, la operación del instituto y el pago de las pensiones. Además se profundizará en la mejoría de la calidad y calidez de los servicios, indicó.

En conferencia de prensa, el funcionario hizo un balance del primer año de gestión en el Issste y comentó que en el proyecto para crear el sistema universal de salud las instituciones del sector están en el proceso de afinar el catálogo de servicios que se ofrecerá a las personas y elaborar un diagnóstico único del sector.

Confirmó que el gobierno federal presentará el próximo año la iniciativa legal para concretar el proyecto, el cual se centrará en la portabilidad de los servicios, es decir, que los pacientes acudan a atender sus enfermedades en cualquiera de los hospitales del sistema sanitario, independientemente de su derechohabiencia.

Con la universalización se terminará la fragmentación de los servicios. De ahí la importan- cia de contar con un solo diagnóstico del sistema nacional de salud y la decisión en el Issste de no proponer un aumento en las cuotas de los trabajadores y las dependencias públicas, como se planteó en el informe sobre la situación financiera 2013 del organismo.

No litigará con la CNDH

También comentó sobre el convenio entre el Issste y la Comisión Nacional de los Derechos, a fin de capacitar al personal sobre las violaciones de las garantías fundamentales, entre ellas el derecho a la salud, plasmado en la Constitución. Comentó que el instituto no litigará con la CNDH por los exhortos que ésta emita. Además buscará terminar con algunos procesos inhumanos como la obligación impuesta a los adultos mayores a ir dos veces por año, a oficinas administrativas a realizar el trámite de vigencia de derechos, con lo que pueden seguir cobrando sus pensiones.

Está en análisis una estrategia mediante la cual el trámite se pueda realizar de una manera más sencilla, en principio, que el instituto se acerque a los derechohabientes —y no al revés– y luego con un proceso de verificación aleatoria.