Madrid, 29 de noviembre.

La señal de la Radio Televisión Pública Valenciana (RTVV), en el este de España, fue cortada hoy hacia el mediodía, tras 24 años de emisiones, pese a las protestas de un grupo de periodistas que pasaron la noche tratando de impedir el cierre.

La decisión fue adoptada por el gobierno autonómico, del conservador Alberto Fabra, con el beneplácito del gobierno de Mariano Rajoy, en respuesta a una sentencia judicial, la cual concluyó que el proceso de ajuste de la plantilla que se llevó a cabo en días recientes fue ilegal y, por tanto, se tenía que readmitir a los trabajadores despedidos.

El Partido Popular (PP), en lugar de asumir la sentencia, decidió ordenar el cierre definitivo del ente público, con lo que se acaban 24 años de emisiones y deja sin empleo a mil 700 personas.

RTVV emitía desde hace tres semanas y media bajo el criterio de los periodistas, quienes fueron testigos de cómo los directivos actuaron con criterios ajenos a la profesión y convirtieron la televisión valenciana en el caso más grave de manipulación informativa.

Fabra, preocupado porque por primera vez en dos décadas se cuestionaron las prácticas del PP y del gobierno regional, decidió acelerar el cierre de la televisora. Lo hizo, primero, con la aprobación del congreso local, gracias a la mayoría absoluta del PP, y después con una orden judicial que cumplieron agentes policiales, quienes cortaron el cable de la transmisión entre gritos de indignación y rabia de los trabajadores. En este enlace se puede ver toda la secuencia: www.youtube.com/watch?v=35GDtd9aKKM

Los responsables políticos del PP en Valencia cancelaron sus actos públicos ante el temor de actos en su contra, ante una decisión que deja a la comunidad autónoma sin estación que emita en la lengua local, el valenciano.

Los trabajadores calificaron la medida de golpe de Estado mediático ejecutado con nocturnidad y alevosía.