Nueva York, 18 de noviembre.

Inversionistas extranjeros se deshicieron de activos estadunidenses de corto plazo en septiembre debido a la batalla presupuestal en Washington, que generó preocupaciones de que el gobierno pudiera caer en cese del pago de deuda, de acuerdo con datos del Departamento del Tesoro. Sin embargo, la demanda exterior por valores a más largo plazo subió. Los extranjeros vendieron 106 mil 800 millones de dólares de activos estadunidenses en septiembre, incluyendo activos de corto plazo como letras. Es el mayor declive desde febrero de 2009.

La disputa presupuestal de septiembre forzó a una paralización parcial del gobierno, que duró los primeros 16 días de octubre. Eso afectó el estatus de refugio de las letras del Tesoro de Estados Unidos y elevó con fuerza los rendimientos de notas que vencían a fines de ese mes.

Había mucha gente evitando los bonos de plazos más cortos en la curva de rendimientos, lo que probablemente impulsó la gran caída allí, comentó el estratega de TD Securities en Nueva York, Gennadiy Goldberg.