Petróleos Mexicanos (Pemex) determinará a finales de diciembre cuáles serán los astilleros internacionales que construirán los floteles para alojar a los trabajadores que laboran en las plataformas marinas. El próximo martes 19 de noviembre Pemex tendrá una reunión con las compañías interesadas en la construcción de los hoteles flotantes para precisar aspectos técnicos de los buques especializados y sería hasta finales del año cuando se dé el fallo, informaron fuentes cercanas al proceso.

La agencia de noticias española Efe dio a conocer que Pemex habría reiterado los compromisos alcanzados en los últimos meses sobre la licitación para la construcción de dos floteles en astilleros de Galicia, versión que fue desmentida ayer sábado por Pemex.

Pemex realizó un estudio de mercado que se sometió a la consideración del consejo de administración de PMI Comercio Internacional, la cual finalmente decidió lanzar una licitación pública internacional, por lo que aún sigue sin definirse qué consorcio construirá los floteles.

Reprograman licitación

El proceso de licitación se ha reprogramado varias veces y ahora la última fecha que se definió es a finales de diciembre próximo, después de haberse pasado del 18 de septiembre al 27 de noviembre. Pemex Exploración y Producción reveló recientemente que en la fase final han llegado 11 ofertas precalificadas de 13 propuestas iniciales.

La previsión de entrega de los dos buques hotel (floteles), que tendrían una capacidad para unas 600 personas, se fijó inicialmente para 2015.

La construcción de floteles, que tendrán un costo estimado inicialmente en unos 190 millones de dólares cada uno, surge de la necesidad que tiene Pemex de albergar a más de 17 mil trabajadores que realizan labores en la explotación de yacimientos en aguas territoriales del Golfo de México.

La presión a la que es sometida Pemex para que asigne a los astilleros gallegos la construcción de los floteles responde a la necesidad de obtener oxígeno para seguir operando estas instalaciones industriales. Por ejemplo, en el caso de Navantia Ferrol, el astillero público gallego, está a punto de quedarse sin carga de trabajo. Su último barco en construcción para Australia, el Adelaide, saldrá de las instalaciones entre el 11 y el 15 de diciembre.

En el caso del astillero Hijos de J. Barreras, había firmado una carta de intención con PMI Norteamérica en septiembre de 2012 para la construcción de uno de los floteles, carta cuya vigencia expiró en octubre tras varias prórrogas.

Según la información difundida por Efe, el ministro español de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, habría asegurado que la petrolera mexicana Pemex mantiene sus planes para construir dos floteles en los astilleros gallegos de Barreras y Navantia.

José Manuel Soria se reunió el viernes con el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, así como con el director general de Pemex, Emilio Lozoya, para tratar sobre las diferencias entre Pemex y la española Repsol, así como sobre los contratos navales.

De esta reunión, la Secretaría de Energía (Sener) dio cuenta mediante un escueto boletín de prensa en el que se mencionó que el encuentro fue para intercambiar experiencias de sus respectivos países en materia de reforma energética, sin que la nota oficial mencionara la aparente definición de que los astilleros gallegos construirían los floteles, ni tampoco cita el caso de la relación entre Repsol y Pemex.

Es importante recordar que la paraestatal petrolera mexicana posee una participación de 9.49 por ciento de la propiedad accionaria en Repsol, tenencia accionaria que hasta el tercer trimestre de 2013 le ha representado a Pemex pérdidas por unos 10 mil 125 millones de pesos.

La petrolera mexicana ha manifestado su interés en participar en la explotación conjuntamente con YPF del yacimiento Vaca Muerta en Argentina, mientras que Repsol mantiene un juicio en contra de Argentina por el proceso de expropiación y ha demandando a Chevron por otro acuerdo con YPF, controlado en 51 por ciento por el estado argentino.

En México, el pasado viernes 8 de noviembre, Fluvio Ruiz Alarcón, consejero profesional independiente de Pemex, cuestionó la conveniencia de mantener la participación en Repsol, dado sus resultados financieros negativos.

En este sentido habría que cuestionar a la administración de Repsol sobre la utilidad de seguir gastando energías en tensar las relaciones con países latinoamericanos con actitudes y discursos propios de otro siglo en lugar de centrarse en lograr un mejor desempeño de la empresa energética española, destacó.