En la cancha, Darío Verón es uno de los defensas más recios del futbol mexicano. Pero ayer, durante una conferencia de prensa, estuvo cerca de romper en llanto al hablar sobre Pumas, que en este Apertura 2013 sufren el peor torneo corto de su historia.

A veces no puedo dormir, no descanso bien... le tengo un cariño especial a este equipo, expresó el paraguayo con semblante inusualmente triste y los ojos pequeños y rojos.

Futbolísticamente el equipo está bien, pero mentalmente estamos medio muertos, la verdad. Queremos hacer bien las cosas y no nos salen... hemos tratado de salir, pero no se puede, agregó.

El capitán de los auriazules se encuentra dolido, con vergüenza por el mal paso del cuadro auriazul, y aceptó es responsabilidad de los jugadores.

Nosotros somos los culpables, dijo, y comentó que en el plantel ya sólo quieren que se acabe esta temporada de terror y obtener una victoria este domingo ante Cruz Azul en CU, donde no han ganado, y además para evitar el último sitio de la tabla.

El conjunto de la UNAM suma 10 puntos, uno más que el sotanero general Atlante, que este sábado en Cancún recibe a Jaguares, que aún tiene posibilidades de clasificar.

Los felinos viven su peor torneo corto, pero por lo menos queremos cerrar con dignidad y trataremos de ganar para no quedar últimos, para lo cual adelantó que jugarán con precaución ante los Cementeros, a pesar de ser locales.

El paraguayo Darío Verón estuvo a punto de romper en llantoFoto Jam Media

Los partidos contra Cruz Azul son muy complicados para nosotros, así que primero trataremos de mantener el cero y luego aprovecharemos algo al frente, indicó.

Verón no tuvo duda en atribuir el pésimo torneo a la mala pretemporada que realizaron: “Primero, tenemos un plantel corto y no todos hicieron una buena pretemporada, porque algunos llegaron tarde. Así que unos estaban al ciento por ciento y otros al 60.

Y se veía venir desde la pretemporada, porque no ganamos un partido. Ahí empezamos a perder confianza y después en el torneo empezamos mal y ya no pudimos recuperarnos.

No quiso culpar directamente a la anterior directiva encabezada por Alberto García Aspe, porque nadie quiere hacer mal las cosas, pero creo que les faltó experiencia, aunque insistió en que nosotros somos los que jugamos y somos los culpables.

Tampoco aceptó hablar sobre la posible limpia que harán los dirigentes. Yo respeto a mis compañeros, son profesionales, somos como una familia y estamos todos juntos en las buenas y en las malas, expresó el defensa, quien indicó que su objetivo es no sólo seguir de auriazul la próxima campaña, sino retirarse con la playera puma.