Economía: restas y más restas
Impuestos: sumas y más sumas
PIB: pronóstico desmoronado
estas alturas, el único resultado tangible
(Peña Nieto dixit) del gobierno federal ha sido alinear a la baja todos los pronósticos económicos de organismos financieros –nacionales e internacionales–, consultoras, centros de análisis y conexos. De aquel sólido
crecimiento de 3.5 por ciento que ofreció para 2013 nada queda, y muy cerca ya del cierre de año, el grueso –por no decir todos– de los especialistas en las artes de la prospectiva coinciden en que tal crecimiento
, si bien va, no pasará de 1.2 por ciento, con ganas de reducir, aún más, la ya de por sí famélica proporción en el par de meses que le restan al presente ejercicio fiscal.
Un recorte de 66 por ciento en el pronóstico de crecimiento económico pondría a temblar al más parado, pero todo indica que para el gobierno mexicano eso es pecata minuta, pues aquí la cosa es calmada (Clavillazo dixit). Salvo exprimir hasta las piedras para obtener más recursos tributarios (y gastarlos en lo mismo que, a lo largo de 30 años, ha paralizado la economía nacional), no hay un plan concreto (ni B ni Z) para reactivar la maltrecha economía nacional.
Tan preocupados están en el Ejecutivo y demás poderes de la unión, que sus integrantes decidieron no ajustar
ni un solo peso en su monárquico tren de vida, mientras a los mortales cotidianamente exigen sacrificios por el bien de la patria
. Conocida ya la catarata fiscal que en 2014 se dejará caer sobre los mexicanos de a pie, la clase gobernante decidió incrementar las partidas presupuestales que le corresponden y aceitar aún más su tren de vida, en el entendido de que ni de lejos está dispuesta a tomar más agua y menos Petrus.
Y mientras los mexicanos silenciosos se preparan para pagar todo lo que la clase política les ha recetado, el Centro de Investigación en Economía y Negocios (CIEN) del Tecnológico de Monterrey, campus estado de México, nos ofrece un paseo por la realidad del sector industrial nacional. Va pues.
La actividad industrial registró una caída de 0.7 por ciento con respecto a agosto del año pasado, lo que confirma la desaceleración presente en dicho sector de la economía nacional. Lo anterior podría perjudicar las estimaciones de crecimiento económico para finales del año, ya que la actividad industrial representa una proporción importante del producto interno bruto.
Aunado a lo anterior, el ramo de la construcción continúa exhibiendo una tasa de crecimiento negativa, que alcanza un desplome de 5.1 por ciento. Tal comportamiento se debe a que todos los componentes del sector presentan cifras negativas, siendo el de ingeniería civil el más preocupante, ya que reporta un desplome de 8.3 por ciento. Adicionalmente, los fenómenos meteorológicos de septiembre pasado, que dejaron daños en infraestructura y vivienda por al menos 75 mil millones de pesos y tuvieron un impacto de 1.4 billones de pesos en el valor de la actividad económica, según cifras del Inegi, pone de manifiesto que las próximas cifras de inversión en los ramos de la actividad industrial destinados a la reconstrucción y compensación de los daños generados por las tormentas impactarán en cierta medida en el desempeño de los indicadores para los últimos meses del año.
Si bien las manufacturas presentaron un aumento de 1.6 por ciento en agosto pasado, el resultado es menor al exhibido en 2012 y 2011. Dicho incremento se debe a alzas importantes en computación, derivados del petróleo y maquinaria y equipo, que se vieron compensadas por caídas significativas en muebles, insumos textiles e impresión. En este sentido, urge encontrar las medidas necesarias para impulsar el dinamismo de los rubros de manufacturas, de tal forma que se evite que en los próximos periodos se coloquen con tasas negativas, lo que, aunado a la situación crítica que vive el sector de la construcción, pudiera traer como consecuencia un menor crecimiento económico en 2013.
En lo que concierne al sector textil, se aprecia que únicamente el ramo del vestido presenta un aumento de 3.4 por ciento, en tanto que las demás actividades exhiben variaciones negativas, siendo las caídas en insumos textiles (12 por ciento) y en confección (4.4 por ciento) las más relevantes. Por su parte, los sectores de la madera y de la impresión presentaron una contracción en su desempeño (5.6 y 11.1 por ciento, respectivamente), en contrasentido con los productos derivados del petróleo, los cuales manifestaron un mejor desempeño con respecto al 2012 (7.1 comparado con -3.0 por ciento).
En lo que respecta a la industria metalmecánica, el CIEN señala que se observa un desempeño negativo, principalmente por la caída en los productos no metálicos (3.8 por ciento) y en los productos metálicos (1.9), así como por el incremento marginal exhibido por los metales básicos (0.9). Por su parte, equipo eléctrico manifestó una caída de 5.2 por ciento, en contrasentido con el incremento de 4.2 exhibido durante el mismo periodo del año pasado.
El comportamiento descrito se ve reflejado en la tendencia de la actividad industrial, la cual todavía exhibe un leve movimiento al alza. En este sentido, a pesar de que sectores como el de manufacturas y electricidad aún muestran un dinamismo elevado, la tendencia estancada de la minería y, más preocupante aún, el movimiento a la baja del sector de la construcción, podrían propiciar un cierre de año complicado en materia de actividad industrial. Adicionalmente, existe una importante moderación en el ciclo de los derivados del petróleo, el equipo de cómputo, y la maquinaria y equipo. En este sentido, dada su importante participación en la actividad industrial, la moderación en el dinamismo de los ciclos podría implicar una baja en su desempeño económico para los próximos meses.
Finalmente, las bajas predominantes en algunos sectores de la actividad industrial y la moderación en aquellos que generan un nivel importante de alto valor agregado dan por sentado que si bien hay una ligera alza en el comportamiento de la tendencia, probablemente no sea suficiente para compensar las caídas en las tasas de crecimiento, lo cual podría limitar en forma importante el desempeño de la actividad industrial del país durante los próximos meses.
Las rebanadas del pastel
Televisa se retuerce ante la inminente pérdida del cofre del tesoro que le representa el Mundial 2014. La dueña de los devastados ratoncitos verdes cree que su jugoso negocio futbolero se resuelve con un simple cambio de director técnico, cuando en los hechos el problema comienza con el propio Emilio Azcárraga Jean y voraces socios que lo acompañan.
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