La tormenta tropical Ingrid propició tres nuevas muertes documentadas ayer en Tamaulipas, donde pobladores de al menos 24 ejidos de los municipios de Gómez Farías y Mante estaban incomunicados.

También se atribuyeron al meteoro daños que afectaron a decenas de miles de habitantes de San Luis Potosí e Hidalgo, y se le responsabilizó del desbordamiento del río Usumacinta, que incomunicó a más de 5 mil personas en el municipio de Playas de Catazajá, del norte de Chiapas.

Dos mujeres murieron por las lluvias en el ejido El Chamal, del municipio tamaulipeco de Ocampo, y se halló a un jornalero muerto en el río Corona, a la altura del municipio de Güemez.

Vecinos del ejido Loma Alta esperaban ayer que el nivel del agua bajara para desplazarse a la cabecera municipal de Mante en busca de víveres. El agua producto de los escurrimientos de Ingrid cubría este miércoles casi 10 kilómetros de longitud de la carretera nacional México-Laredo.

Protección Civil de Gómez Farías indicó que los poblados incomunicados carecían de electricidad, mientras que la parroquia, la casa de cultura y la secundaria del lugar eran utilizados como refugios temporales. Destacó que para el próximo viernes se habrán terminado los víveres en esos albergues.

El gobernador de San Luis Potosí, Fernando Toranzo, informó que por Ingrid se declaró en emergencia a 25 municipios, 53 comunidades estaban aisladas, había una persona desaparecida, 20 mil padecieron afectaciones en sus viviendas o estaban aisladas, y 928 pobladores se hallaban en refugios temporales. En tanto, el secretario de Educación estatal informó que más de 250 mil alumnos volverían a clases este jueves en la región huasteca.

El gobierno de Hidalgo informó que más de 25 mil personas estaban incomunicadas, además de que casi 100 familias padecieron daños en sus viviendas y actividades productivas. Añadió que el municipio más afectado por Ingrid es Pisaflores, donde la cabecera municipal y 22 comunidades perdieron comunicación por tierra.