“Un campeón nunca se va. Gracias Chucho”, rezaba una manta en el centro de la cancha
Brindaron dos minutos de aplausos al ecuatoriano, campeón de goleo tres veces consecutivas
Cada gol fue para Christian; es una forma de agradecerle lo que hizo por el equipo: Herrera
Domingo 4 de agosto de 2013, p. a13
En su primer partido disputado en el estadio Azteca, luego de coronarse campeón del torneo Clausura 2013, el América goleó 3-0 al Atlas, en un encuentro emotivo para la afición amarilla, pues se rindió un homenaje al fallecido Christian Benítez.
Los tantos fueron de Narciso Mina, al minuto 26, Raúl Jiménez (69) y Rubens Sambueza (75).
Antes del encuentro se colocó al centro de la cancha una manta blanca con la forma de una playera de futbol, en la que estaba impreso el escudo del América y una imagen del jugador ecuatoriano, así como la leyenda “Un campeón nunca se va. Gracias Chucho”.
En ese momento, la afición, que ya estaba dentro del inmueble, comenzó a aplaudir y lanzó una gran ovación para el que fue campeón de goleo tres veces consecutivas.
Posteriormente, los jugadores de ambos escuadras se colocaron al centro del terreno de juego y se pidió un minuto de aplausos para quien en su época de americanista portó la camiseta con el número 11.
Pero el homenaje no acabó ahí, pues el público volvió a brindar un minuto de ovaciones para el ecuatoriano, y en una de las pantallas del estadio se podía ver su imagen besando la copa que el equipo logró el torneo anterior.
El encuentro comenzó con gran intensidad con el Atlas. Sin embargo, fueron las Águilas las que inauguraron el marcador al minuto 26, luego de que en un contragolpe Sambueza consiguió la pelota y la dirigió hacia el área chica. Ahí envió un centro que Mina remató de cabeza para perforar la red de Pinto.
La reacción del equipo tapatío no tardó en llegar. Al minuto 30, Gregorio Torres, por el sector de la izquierda, envió un centro a Matías Vuoso, quien de cabeza se la bajó a Omar Bravo; éste controló con el pecho y sacó disparo con la pierna derecha, pero el esférico se fue por encima de la portería.
En los minutos restantes, el Atlas, dirigido por Omar Asad, ya no pudo hacer nada y se fue al descanso con un gol en contra, a pesar de haber tenido más llegadas que el conjunto local.
Durante el medio tiempo la afición siguió ovacionando a Benítez. Comenzó a gritar ¡Chuchooo, Chuchooo!, pero de forma sorpresiva los seguidores del equipo visitante respondieron con un ¡Se murió!, ¡Se murió!, lo cual provocó indignación de los americanistas, quienes enseguida lanzaron chiflidos y profirieron insultos.
Para el complemento, ya con el estadio casi lleno, los Zorros no dejaron de insistir y continuaron con su juego intenso, pues Vuoso disparó a la portería, pero una vez más Moisés Muñoz logró quedarse con el balón.
El segundo gol americanista llegó al 69, por conducto de Jiménez, quien con potente disparo con la pierna derecha conectó efectivamente un pase de Sambueza.
Al 75 llegó el tercer tanto local con un tiro libre directo cobrado de forma espectacular por el mismo Sambueza, derivado de una falta de José Luis Chávez contra Christian Bermúdez.
En el tiempo restante el Atlas no logró encajar el balón en la portería de Muñoz y acumuló su segunda derrota en este torneo.
Al final del encuentro, el técnico Miguel Herrera dedicó el triunfo a Benítez: Como todos ustedes saben, ha sido una semana complicada por lo que sucedió con Christian, quien era parte importante del grupo, y aunque ya no pertenecía al América, nunca pensamos que las cosas se darían de esa manera. El festejo de los muchachos en cada gol, obviamente fue para él. Esta fue otra forma de agradecerle lo que hizo en el equipo
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Admitió que fue difícil
jugar con sentimientos encontrados; por un lado, la tristeza por la muerte del ecuatoriano, y por otro, la felicidad por estrenar la copa en el Azteca.
Por su parte, el entrenador Asad afirmó que el que anota gana. Tuvimos chance; el primer gol fue falta de picardía, en el segundo entregamos el balón y esos errores nos costaron caro, estoy dolido por la derrota
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En tanto, Mina afirmó que su anotación fue una forma de rendir homenaje a su ex compañero, pero me costó mucho porque no jugué durante seis meses. Ahora voy a aprovechar la oportunidad que me dan. Trato de acoplarme a lo que me dice el entrenador y esperamos llenar sus expectativas
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