Presentaron Terrorismo mediático, libro del académico y colaborador de La Jornada
el cálculo mafioso de los manipuladores de la información
Nos alerta sobre un programa de espionaje electrónico, dijo el ex embajador de Bolivia en México
Sábado 13 de julio de 2013, p. 4
El ensayo Terrorismo mediático: la construcción social del miedo en México, escrito por el investigador y académico Carlos Fazio, expone la manipulación de que es objeto la opinión pública, la manera en cómo opera la desinformación de ciertos medios de comunicación nacionales e internacionales, y nos alerta sobre “la existencia de un programa ultrasecreto llamado Prisma, para espionaje electrónico y vigilancia de servicios de comunicación”, destacó Jorge Mansilla, ex embajador de Bolivia en México, quien junto con el especialista Óscar González César y el autor presentaron el volumen, la noche del jueves, en el foro que organizan la Casa Lamm y La Jornada.
Publicado por el sello Random House Mondadori, en su colección Debate, Terrorismo mediático... reflexiona sobre el tema de la información, la desinformación y la enajenación, como armas ideológicas
.
Mentiras y complicidades
Se trata de un arduo trabajo de investigación en el que se articulan hechos y datos recientes, así como un marco histórico y teórico, que ponen al descubierto las mentiras, estrategias y complicidad entre el poder dominante y los medios vinculados con éste, incluidos Internet y redes sociales, explicó Óscar González César.
El volumen tiene 13 capítulos. En la primera parte se hace una revisión histórica sobre el arte de la desinformación
, desde hace 3 mil años a la fecha. Se habla sobre la guerra sicológica
y de cómo los medios son sustento y extensión del poder.
Carlos Fazio “muestra el modus operandi de los medios en México, como Televisa y Tv Azteca, así como de ciertos medios extranjeros. Exhibe cuáles son sus objetivos políticos y los intereses que defienden, a través del análisis de distintos asuntos, como ‘el caso Paco Stanley’; la huelga de la Universidad Nacional Autónoma de México, en 1999; los videoescándalos de Carlos Ahumada, en 2004; el desafuero de Andrés Manuel López Obrador, y el conflicto de Atenco, entre otros”.
Por su parte, Jorge Mansilla, comenzó su intervención con una enérgica condena al bloqueo aéreo
del que fue objeto el presidente de Bolivia, Evo Morales, el pasado 2 de julio. Se trató, dijo, de un boicot concertado, de un cálculo criminal, que pudo haber sido un magnicidio
.
La condena, apuntó Mansilla, “ha sido mundial y unánime, aunque los cuatro gobiernos coludidos en ese acto criminal –Italia, Francia, España y Portugal– se desbalaguen ahora con explicaciones ridículas que hacen más patética su colusión.
“Washington, que construye una repudiable muralla a lo largo de nuestra frontera norte para impedir el tránsito de seres humanos, acaba de demostrar al mundo que puede también implantar un infame muro en el espacio aéreo internacional, encargando a algunos gobiernos europeos su custodia y control como torpes agentes de una policía migra espacial a su servicio. En el argot mexicano, diría que Washington le puso un cuatro a Evo y convenció para ello a un cuarteto de presidentes con vocación cuatrera”, expresó Mansilla.
Respecto del libro Terrorismo mediático..., señaló que el autor, “enfrenta con pruebas irrebatibles el cálculo mafioso y ventajista de ciertos círculos que manipulan noticias contra pueblos y gente de lucha.
“El sistema dominante, en gran parte de América Latina tiene una plataforma mediática bien aceitada, especializada para desinformar, desvirtuar, aderezar, endulcorar o agriar –según el caso–, todos los hechos noticiosos a su conveniencia”.
Artilugios de la dominación
Jorge Mansilla destacó que el libro de Fazio, colaborador de La Jornada, “alerta sobre la existencia de un programa ultrasecreto llamado Prisma para espionaje electrónico y vigilancia de servicios de comunicación”.
Para concretar ese programa, según Mansilla, “se coludieron la Casa Blanca, los poderes Legislativo y Judicial, la CIA y el Pentágono con los nueve grandes proveedores de Internet: Google, Facebook, Apple, Microsoft, Yahoo, AOL, Sky, YouTube y Paltalk.
“Prisma podría desatar el ciberacoso, inducir a la criminalización de las redes sociales, manejar las páginas de Facebook como pruebas autoinculpatorias, convertir el blog en shock y/o crucificar a los tuiteros con clavos ardientes de 140 caracteres”.
Para concluir, Jorge Mansilla se refirió a Julian Assange, Bradley Manning y Eduard Snowden, como gente salida de la galaxia imperialista, para revelarnos los artilugios de la dominación y el control global
. Sigamos sus causas como nuestras, exhortó.
Padecen encierro, clandestinidad y prisión porque se lanzaron contra el terrorismo mediático y la construcción social del miedo
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