Integrar una red de guionistas iberoamericanos que informe sobre las circunstancias particulares de cada país en materia laboral y de derechos de autor, para que se dé a los escritores de cine su valor real, objetivo, en el proceso de producción, fue una de las principales conclusiones del segundo Encuentro Iberoamericano de Escritores Cinematográficos, que concluyó el pasado viernes bajo la organización de El Garfio, AC.

La sede fue el Centro Cultural Universitario Tlatelolco de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en la que tras cuatro días de mesas de trabajo, que incluyeron la participación de 31 especialistas, 200 personas, en su mayoría alumnos de carreras audiovisuales y profesionales de televisión y del séptimo arte, y la proyección de películas con la asistencia de los respectivos directores, se subrayó la importancia de hacer respetar el trabajo del guionista.

Misión cumplida

En entrevista, Raúl Flores Alonso, presidente de El Garfio, expresó que se cumplieron los fines; los ponentes hablaron de la función del escritor cinematográfico en el proceso de dramaturgia. “Cada especialista refirió desde su experiencia cómo ha sido su aprendizaje y transmitió a los asistentes la manera de cómo han mejorado sus historias.

Quedó asentado que el inicio del proceso de escritura cinematográfica puede iniciar a partir de que se tiene claro qué se quiere contar. Por algunas de las preguntas se notó el alto nivel de algunos jóvenes.

Añadió que fue fundamental el pitching (reunión de guionistas y productores), en el que se dieron a conocer ocho proyectos evaluados por un jurado interno de El Garfio. Se plantea cuál es la necesidad de que se haga una película. Estos guiones, se puede decir, están verdes. Esto es para crear un mercado directo entre escritores y productores. La idea es que se hagan muy buenas cintas. Estamos en el segundo encuentro y cuando se haga el primer filme se logrará un fin primordial”.

No obstante, observó que en este encuentro faltó mayor presencia de especialistas extranjeros. Muchos no pudieron venir porque están trabajando. Otra causa es la falta de presupuesto. En el tercer encuentro esperamos diversificar la presencia de escritores extranjeros. Nos falta más difusión previa y durante el encuentro, dentro y fuera del país.

También se dejó en claro que el guion no debe ser visto como un gasto inútil. Es imposible hacer un producto de buena calidad sin materia prima de alta calidad. Hay productores que no lo ven así y hay que cambiar esa idea. El guion es algo dinámico y bien trabajado puede dar lugar a una historia poderosa e interesante. Para el tercer encuentro esperamos dar continuidad lógica a lo hecho y tal vez el tema sea el de los géneros, como terror o animación. Iremos hacia lo específico. Continuaremos con los talleres y la duración será, otra vez, de cuatro días. Elaboraremos las memorias; esto ayudará a la continuidad. Hay muchos planes; ya veremos dentro de dos años.