Venden
el movimiento de los indocumentados mexicanos
Domingo 23 de junio de 2013, p. 15
Chicago.
Tres reconocidas organizaciones defensoras de migrantes denunciaron que el Partido Demócrata financia y apoya a agrupaciones que desmovilizan y venden
el movimiento de los mexicanos indocumentados. A una de ellas hicieron entrega simbólica del Bullshit Award, compuesto de dos grandes piezas de plástico que simulan excremento, el cual fue colocado en cojines rojos a la entrada de un elegante acto de recaudación de fondos para apoyo a indocumentados
.
Ocupa Chicago, el Comité 10 de marzo y la Campaña por la Moratoria a las Deportaciones acusaron a la Coalición en Illinois para los Derechos de los Migrantes y los Refugiados (ICIRR, según sus siglas en inglés) de usar un lenguaje ilusorio y fraudulento para engañar a indocumentados mexicanos y centroamericanos, que son captados para ayudarlos
mediante un sistema clientelar
.
Aseguran que gracias a apoyos económicos y políticos, ICIRR –dirigida por Benito Lawrence, hijo de migrantes de las Filipinas– es la principal organización regional dedicada a cabildear la reforma migratoria impulsada por Barak Obama.
La coalición impugnada, señalan, pone en práctica la misma estrategia utilizada para apagar las históricas marchas hispanas de 2005-2006: cooptar a los líderes sociales juveniles, buscar que la comunidad mexicana les dé legitimidad y negar la inclusión de los mexicanos a posiciones ejecutivas mediante un discurso de supuesta diversidad y multiculturalidad que acaba hundiendo todavía más a los latinos
.
José Herrera, líder de la Coalición por la Justicia del Inmigrante, señaló como causa de la protesta los lazos políticos de ICIRR con el Partido Demócrata, de donde proviene parte de su presupuesto.
Otros dirigentes acusaron al Concilio Nacional de la Raza, NALAAC, FIRM y otras ONG catalogadas como no lucrativas, de empeñar sus principios a cambio de fondos económicos federales que recibirían de ser aprobada la reforma.
El camino a la ciudadanía puede durar 13, 20 o 50 años, y la clave para ellos es que sigan cayendo los millones de dólares que alimentan la esperanza de los necesitados
, afirman.