Integrantes del Movimiento de Aspirantes Excluidos de la Educación Superior (MAES) afirmaron que el programa de expansión de la matrícula para ese nivel educativo presentado por la Secretaría de Educación Pública (SEP), no tiene nada nuevo. Son parte de las mismas propuestas que cada año presentan en la mesa de negociación con los movimientos de jóvenes que no son aceptados.

Luego de una movilización que partió de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros hacia la sede de Educación Pública, Diego del Ángel, integrante del MAES, señaló que sus demandas son muy claras. Lo hemos dicho durante ocho años: queremos soluciones de fondo, no paliativos.

Un contingente de poco más de cien jóvenes egresados de bachilleratos generales y técnicos marcharon por avenida San Cosme, para seguir por Puente de Alvarado, Paseo de la Reforma, Juárez, 5 de mayo y Brasil, donde realizaron un mitin frente al acceso principal de la SEP.

Los inconformes denunciaron que las propuestas lanzadas por la dependencia –otorgar 36 mil 376 espacios adicionales para quienes no logren ingresar a alguna de las instituciones públicas de educación superior que seleccionaron– comparten un común denominador: ignoran las necesidades y expectativas de los jóvenes.

Tras presentar su pliego de demanda en el que exigen mayores recursos para educación superior pública, la creación de nuevos campus universitarios, y la desaparición de los exámenes estandarizados para definir el ingreso a las instituciones de educación media y superior, pidieron la instalación de una mesa de negociación en la que participen autoridades de Educación Pública, las universidades Nacional Autónoma de México, Autónoma Metropolitana y del Instituto Politécnico Nacional.

Insistieron en que la solución a la demanda de mayores espacios educativos para quienes concluyen bachillerato no se va a resolver canalizando a miles de jóvenes a modelos educativos a los que no desean ingresar, como educación abierta y a distancia, donde se abren más de 22 mil lugares.

Esta modalidad, agregaron, no puede ser considerada una alternativa a la falta de cobertura.

Somos una generación que ha nacido en un mundo dirigido por computadoras, no le tenemos miedo a la tecnología, pero queremos educarnos apoyándonos en las nuevas tecnologías, pero también con el acompañamiento de maestros, compañeros y con el acceso a instalaciones culturales y deportivas.

Señalaron asimismo en el pliego que la propuesta de abrir 5 mil 270 lugares en universidades privadas, mediante pago de colegiaturas de mil pesos, es un acuerdo que cada año se presenta en la mesa, pero es mínimo el número de espacios disponibles en el sistema presencial en la UNAM y UAM.