Familiares, amigos, políticos y empresarios asistieron ayer a las exequias de Juan Ignacio Torres Landa, ex candidato a gobernador de Guanajuato, mientras en Querétaro, son velados los restos de Manuel Palacios Alcocer, hermano de Mariano Palacios, embajador de México en el Vaticano. Ambos políticos fallecieron el viernes en un accidente aéreo en la capital de San Luis Potosí.

Las cenizas de Torres Landa arribaron a las 11:20 horas en una funeraria de León, Guanajuato, de manos de su viuda Maricela Aranda. Ella y sus hijos Juan Ignacio, María Jimena, Luz María y Azul Etcheverry, fueron recibidos con aplausos.

A las 13 horas arribó el gobernador Miguel Márquez Márquez. Después de dar el pésame a la familia, el político panista reveló que tenía una cita en estos días con su ex contrincante electoral para platicar de unos proyectos que tenía para Guanajuato. Él tenía inquietud en el plan hidráulico, comentó.

Una hora después llegó a dar el pésame la alcaldesa de León, la priísta Bárbara Botello Santibáñez, tras encabezar una reunión del cabildo para detallar un homenaje póstumo que se organizará en memoria de Torres Landa la tarde de este domingo. El PRI hará lo propio por la mañana en la ciudad de Guanajuato.

En la iglesia Operarios de Cristo de Querétaro, fueron despedidos Manuel Palacios y el empresario José Oleszcovski Wassertell. En la homilía no estuvo presente Mariano Palacios, quien este lunes presenta sus cartas credenciales en el Vaticano.

La noche del viernes, el gobernador José Eduardo Calzada Rovirosa acudió a la funeraria donde fueron velados los cuerpos de Palacios Alcocer y Oleszcovski Wassertell, para dar el pésame a los familiares de ambos empresarios.

En San Luis Potosí, el gobernador Fernando Toranzo Fernández anunció que su administración colaborará con la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en las investigaciones que se realizan acerca del percance en el que murieron ayer ambos políticos y otras tres personas.

Por el momento, la DGAC determinó que la aeronave Bell 206, matrícula N207JA, despegó de una plataforma no controlada.