José Manuel Chepo de la Torre, técnico de la selección nacional, rechazó enviar un mensaje a la afición para que esté tranquila y confiada en que se clasificará al Mundial de Brasil 2014. Yo nunca aseguro nada. No sé si mañana estaré aquí, ni siquiera si voy a seguir viviendo, argumentó.

Lo que sí puedo hacer, agregó, es trabajar en el campo, con los jugadores, hacerlo al ciento por ciento; eso sí lo puedo asegurar. Mientras esté, lo haré con toda mi capacidad, con toda mi integridad, para poder transmitirlo al grupo de trabajo y así poder, conjuntamente, lograr los objetivos que nos hemos planteado.

En la conferencia de prensa de ayer en el Centro de Alto Rendimiento de la Federación Mexicana de Futbol, Chepo consideró que la afición tiene gran confianza en el Tricolor, con base en un trabajo que se hace de grupo, serio, donde se han dado resultados constantemente. El hecho de que no ganes un partido, dos, no quiere decir que no los vas a seguir ganando, explicó.

El estratega tampoco quiso hablar de suposiciones cuando le hicieron ver que si vencen a Jamaica, Panamá y Costa Rica (el 4, 7 y 11 de junio, respectivamente) se pondrían muy cerca de la Copa del Mundo.

Lo real es que tenemos tres puntos (en la eliminatoria) y estamos fuera del Mundial ahora. Estamos hablando que quedan siete partidos y que éstos nos pueden dar la oportunidad de ponernos en zona de clasificación.

Evitó dramatizar sobre la trascendencia de los tres encuentros de la eliminatoria que tienen en puerta, puntualizando que para ellos todos los partidos son igual de importantes.

Además, dijo que aunque las formas siempre importan, a final de cuentas el resultado es lo que vale; es lo que se queda plasmado, te pone o te saca de un Mundial o una competencia.

Estimó que el Tricolor siempre ha sido muy constante en su forma de jugar, salvo el partido contra Jamaica (que empataron en el Azteca), que ese sí fue diferente. Fuimos imprecisos, un poquito descontrolados. Y contra Honduras y Estados Unidos, que estuvimos muy cerca de ganarlos, algunas desatenciones costaron los puntos y en otras no supimos concretar para matar al rival.

El plantel trabajó ayer por la mañana aún con la ausencia de los ocho seleccionados que jugaron la final entre América y Cruz Azul (quienes deberían reportarse por la tarde para el viaje a Houston).

Se preguntó al técnico si hará algo especial para recuperar a los cuatro cementeros (Jesús Corona, Gerardo Flores, Gerardo Torrado y Pablo Barrera) del golpe anímico por llegar derrotados, y aseguró que eso sucede con todos los jugadores. Por supuesto que el golpe de perder una final es fuerte, pero también tuvieron toda esa emoción y ese trabajo de poder llegar a ese partido; eso también te reconforta y da fortaleza de que hiciste bien las cosas.

Lo que sí dejan en claro es que acá es otro objetivo, es otro grupo de trabajo y que hay que enfocarnos exclusivamente a lo nuestro.

Algunos seleccionados, mientras tanto, felicitaron a los dos equipos por el partido que brindaron. Se volvió una final muy bonita. En lo personal, sueñas a veces jugar una final así; como futbolista es soñada, comentó Carlos Salcido, mientras Aldo de Nigris dijo que fue cardiaca para todos. Te das cuenta de que no puedes dejar de luchar un segundo, son 90 minutos y hasta el último debes tratar de dar lo mejor, porque puede pasar eso.