Ayer fueron cremados sus restos; medios europeos dieron la noticia del fallecimiento
Martes 28 de mayo de 2013, p. a40
Con una gran ovación, amigos y familiares despidieron ayer a José María Pérez Gay en el Panteón Francés de la Ciudad de México. Los restos del escritor y diplomático, que falleció este domingo, fueron cremados a las 13 horas. En Europa, incontables medios alemanes, austriacos y suizos dieron noticia del fallecimiento del autor, considerado uno de los puentes culturales más importantes entre México y Alemania. A Pérez Gay se le considera hijo predilecto de la capital alemana, Berlín.
En el Distrito Federal, acudieron al cementerio el jefe de Gobierno capitalino, Miguel Angel Mancera; el escritor Héctor Aguilar Camín; el ex embajador Héctor Vasconcelos; la viuda de Carlos Fuentes, Silvia Lemus; Ignacio Toscano, director de Instrumenta Oaxaca, y el cineasta Luis Mandoki, entre otros.
En una ceremonia íntima en la sala Alpes del Panteón Francés, su viuda Lilia Rossbach –en compañía de sus familiares e hijos– agradeció el apoyo a los amigos que le manifestaron sus condolencias. Posteriormente se escuchó una ovación.
Rossbach informó que el gobierno de la ciudad organizará un homenaje póstumo al autor de El imperio perdido, el cual podría ser la próxima semana. Asimismo, expresó que aún no se decide la fecha del homenaje nacional que realizará el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes en coordinación con el Instituto Nacional de Bellas Artes.
Como se informó ayer, una parte de las cenizas del intelectual será depositada en el Parque España, de la colonia Condesa, lugar de sus entrañables recuerdos de infancia. Después de los homenajes que organicen las instituciones culturales, otra parte se depositará en la ciudad de Berlín.
Su hermano Rafael explicó que la editorial Cal y Arena publicará algunos de los libros inéditos que dejó José María, así como algunos artículos publicados en La Jornada.
El historiador y cronista capitalino, Guillermo Tovar y de Teresa, expresó sus más profundas condolencias por la pérdida del autor, a quien describió como un amigo entrañable.
Añadió que el legado primordial del autor de El imperio perdido fue el acercamiento que produjo en muchos de sus lectores hacia el mundo centroeuropeo, a los autores del extinto imperio austro-húngaro, que conoció como nadie.
Guillermo Tovar y de Teresa enfatizó que, gracias a Pérez Gay, en México se fomentó la lectura de autores como Walter Benjamín, Robert Musil y Joseph Roth, por mencionar a algunos cuantos. Fue importante que hubiera alguien que fuera lector y al mismo tiempo difusor de autores universales que no son demasiado conocidos
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Doctor en filosofía germanística por la Universidad Libre de Berlín, en 2004, en una visita a la capital alemana Pérez Gay destacó el honor que para él significó ser el encargado del discurso laudatorio cuando esa institución alemana le otorgó a Carlos Fuentes el doctorado honoris causa.
La presencia del filósofo en Alemania no pasaba desapercibida en diversos círculos culturales. Uno de los últimos hechos que dieron cuenta sobre su quehacer en ese país fue el pasado verano de 2012, al leerse en español, y traducida al alemán, parte de su correspondencia con la antropóloga y activista Margarita Uría Hermosillo, durante la presentación en Berlín y Braunschweig de la obra de teatro El rumor del incendio, por parte del grupo mexicano de teatro independiente Lagartijas Tiradas al Sol.