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Manifestantes se congregaron en Lisboa para pedir que se resuelva el desempleo y la crisis

Exigen miles la dimisión del gobierno de Portugal; repudio a políticas de austeridad

Participa el movimiento Que se vaya al infierno la troika con poder de convocatoria en todo el país

 
Periódico La Jornada
Domingo 26 de mayo de 2013, p. 26

Lisboa, 25 de mayo.

Miles de personas se manifestaron este sábado en Lisboa para exigir la dimisión del gobierno, cuya política de austeridad, impuesta por los prestamistas del país, ha agravado considerablemente la recesión y el desempleo.

Cambiar de política, el gobierno fuera, en contra de la explotación y del empobrecimiento, eran las principales consignas de la manifestación convocada por la Confederación General de Trabajadores Portugueses (CGTP), el principal sindicato portugués.

Hay que hacer todo lo que está a nuestro alcance para deshacernos de este gobierno, declaró el secretario general de la CGTP, Armenio Carlos. El sindicato anunció un día nacional de lucha para el próximo jueves, con manifestaciones en todo el país.

La movilización contó con el apoyo del movimiento apolítico Que se lixe a troika (Que se vaya al infierno la troika) que en marzo pasado reunió contra la austeridad a cientos de miles de personas a lo largo del país.

La austeridad castiga a los pobres pero beneficia a los ricos y Ladrones, ladrones, se leía en carteles con el retrato del primer ministro Pedro Passos Coelho, agitados por los manifestantes, muchos de ellos funcionarios, desempleados y jubilados.

El gobierno tiene que dimitir ya, declaraba Maria, de 57 años, sin empleo desde hace meses, al igual que su marido y su hija. “Hemos venido a Lisboa para decir ‘basta’. El gobierno corta todo, incluso las jubilaciones. El presidente tiene que echarlo”, agregó Antonio Amoreira, procedente de Porto, al norte del país.

El presidente Anibal Cavaco Silva, cuyo papel es esencialmente protocolario, puede disolver el Parlamento y convocar elecciones legislativas anticipadas, como lo desean actualmente 57 por ciento de los portugueses, según un sondeo publicado este sábado por el diario Público.

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Protesta este sábado frente al palacio presidencial en Lisboa para exigir la salida del gobierno, al cual responsabilizan por la crisisFoto Reuters

El descontento social se reforzó tras el anuncio, a principios de mayo, de un nuevo plan de ajuste que incluye el aplazamiento de 65 a 66 años de la edad de jubilación, la eliminación de 30 mil puestos de funcionarios de los casi 700 mil y la prolongación de sus jornadas laborales semanales de 35 a 40 horas.

En 2011 Portugal recibió un paquete de rescate de 78 mil millones de euros de la troika de acreedores, integrada por la Unión Europea (UE), el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo, a cambio de fuertes medidas de ahorro. A consecuencia de dichas medidas, la economía se contrajo 3.2 por ciento en 2012. Para este año se prevé un retroceso de 2.3 por ciento y una tasa récord de desempleo de 18.2 por ciento. Italia pide flexibilidad fiscal para promover el empleo

En Roma el primer ministro italino, Enrico Letta, pidió una mayor flexibilidad para los países que respeten en términos generales los objetivos de déficit de la UE, de forma que tengan margen para financiar programas de creación de empleo.

Se espera que el miércoles la Comisión Europea borre a Italia de su lista de países inclumplidores del déficit público, en reconocimiento por sus esfuerzos para lograr el objetivo de 3 por ciento.

En una carta al presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, Letta dijo que es necesario conceder a los países fuera de esa lista la posibilidad de beneficiarse de márgenes reales de flexibilidad para hacer inversiones destinadas a crear puestos de trabajo. Letta dijo que debatirá sus ideas con Van Rompuy durante su visita a Roma el 31 de mayo.

Italia tiene el mayor endeudamiento en Europa después de Grecia, que llegó a 126.1 por ciento del PIB en 2012.