Se complican las negociaciones entre Aeroméxico y la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA). La empresa mantuvo su posición de que no revisará el contrato colectivo de trabajo, hasta que se resuelva la demanda de conflicto de naturaleza económica que interpuso contra el sindicato.

La intención de esta demanda, que se encuentra en proceso en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA), es la de reducir los salarios de los trabajadores hasta en 60 por ciento, eliminar prestaciones y ampliar jornadas de trabajo.

En una reunión en el área de conciliación de la Secretaría del Trabajo, las posiciones de la empresa y el sindicato se mantuvieron alejadas, pese a que el 30 de mayo vence el emplazamiento a huelga.

No obstante, la compañía mantuvo su determinación de no realizar la revisión del contrato colectivo de trabajo y la representación de ASSA indicó que, sin esa negociación, se desembocaría en el paro de actividades. De tal forma que no hubo avance en las pláticas, según reportó la asociación.

Además, indicó que el proceso del conflicto de naturaleza económica será el próximo 7 de junio cuando la citada junta resuelva sobre la demanda. Esto se determinó en la audiencia que se llevó a cabo el lunes pasado para que se presentaran los terceros involucrados en el juicio.

Aeroméxico y la Dirección de Aeronáutica Civil (DAC), que habían sido llamados a comparecer, no lo hicieron; en tanto, la representación de Aerolitoral señaló, a su vez, que no tiene interés jurídico en el juicio, por lo que se acordó que será el próximo 7 de junio cuando los peritos nombrados por la aerolínea y por ASSA presentarán las pruebas del caso y la JFCA tendrá que resolver.

La asociación informó ayer a sus agremiados de la posición que mantuvo la empresa en la audiencia, y sostuvo que en la primer semana de junio los peritos de esta organización tendrán que presentar las pruebas de porqué no procede el conflicto de naturaleza económica. Cabe referir que la ley establece que este conflicto sólo se justifica cuando una compañía se encuentra en situación financiera crítica, mientras Aeroméxico además de haber extendido su operación en el mercado nacional –por la salida de Mexicana de Aviación– ha realizado esto prácticamente con el mismo personal y el mismo costo laboral.