El presidente municipal de Juárez, Nuevo León, Rodolfo Ambriz, acató ayer la recomendación 52/2013 de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y ofreció una disculpa pública a los familiares de los cuatro jóvenes que el 17 de julio de 2011 fueron secuestrados por policías de la secretaría de seguridad pública, vialidad y tránsito de esa localidad, y luego entregados a la delincuencia organizada.

Ofrezco una sincera disculpa por los actos u omisiones que pudieran haberse cometido a todos los familiares de Israel Arenas Durán, Adrián Nava Cid y los hermanos Javier y Reynaldo García Álvarez, dijo el edil en la sala de cabildo, donde se hallaban reunidos los parientes de los jóvenes que sufrieron desaparición forzada.

El resolutivo de la CEDH determina además que el municipio debe reparar el daño a los familiares directos de los desaparecidos; otorgar una indemnización a los familiares directos que demuestren ser dependientes económicos de ellos y becar a sus hijos.

Nos han querido callar, pero es sangre de nuestra sangre y carne de nuestra carne, no podemos dejar de buscarlos. La organización Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos y la hermana Consuelo Morales nos ha hecho entender que tenemos derecho a la verdad, dijo Luz María Durán, madre de Israel Arenas.

Sin su apoyo, las autoridades no habrían atendido el caso y habrían señalado a mi hijo como un integrante más de la delincuencia, dijo.

La mujer recordó que el día del secuestro y desaparición de su hijo, de 17 años de edad, éste se comunicó con su hermano, a quien pidió dinero para pagar cervezas que se tomó con sus tres amigos en el bar California, en la carretera San Roque.

Durán narró que el hermano de Israel salió del vivero donde trabajaba y cuando esperaba el siga de un semáforo vio cómo la camioneta en la que se había trasladado su hermano al bar era perseguida por la patrulla de tránsito 131.

Los siguió y se percató de que bajaban, esposaban y subían al hoy desaparecido y a sus tres amigos a una camioneta, que luego sabrían pertenecía a integrantes de la delincuencia organizada.

Sin identificarse, el hermano de Israel cuestionó a los agentes sobre la detención de los jóvenes, le respondieron que habían participado en un incidente de tránsito. Esa fue la última vez que los vio.

El joven identificaría después a Juan Eduardo de León como uno de quienes participó en el secuestro y a Carlos Ochoa Bautista como quien conducía la camioneta donde transportaban a los hoy desaparecidos.

Quince asesinatos y hallazgo de amapola

Por otra parte, la policía ministerial de Nuevo León abatió a cuatro presuntos delincuentes: dos en la carretera Cadereyta-Allende, donde rescató a varias personas secuestradas, y dos en una brecha cercana al entronque de las carreteras a Reynosa y a Los Herreras, en el municipio de China.

En la capital de Chihuahua, seis personas que se encontraban en un lote de autos fueron asesinados por un grupo armado la noche de este martes. Los atacantes ingresaron en un auto al negocio, tres de ellos bajaron y comenzaron a disparar con armas de tres calibres, con el resultado referido.

Durante un enfrentamiento entre policías estatales de San Luis Potosí y miembros de la delincuencia organizada, uno de los delincuentes quedó muerto en la carretera que va a Tanquián, a unos metros del entronque de Barrio Cuayo, en el municipio de Coxcatlán. En la misma entidad, un policía municipal de Ciudad Valles fue asesinado por desconocidos cuando bebía en un bar.

En otras acciones atribuibles a la delincuencia organizada, dos hombres fueron ejecutados ayer en Zacatecas, uno en Valparaíso y otro en Trancoso. En Naucalpan, estado de México, un joven fue asesinado de cincos balazos, dos de ellos en la cabeza. y su cuerpo hallado debajo de un auto, donde al parecer intentó ocultarse. En Puerto Vallarta, Jalisco, una persona muerta fue localizado en un tambo con ácidos y otra en una brecha a 800 metros de la carretera Ocotlán-Labor Vieja.

La Policía Preventiva de Baja California localizó y destruyó un sembradío de aproximadamente 300 mil plantas de amapola en tres hectáreas de la sierra de Tecate. Marco Antonio Montoya Gómez, director de la corporación, dijo que con este plantío se obtendrían 30 kilogramos de heroína, con un valor en el mercado de Estados Unidos de 2 millones 130 mil dólares.