Busca enfrentar a uno de los mejores, no un boxeador facilito
crear famaen México, aunque sacrifique paga
Miércoles 15 de mayo de 2013, p. a15
Para el tres veces campeón en diferentes categorías Ábner Mares lo que importa en este momento es crear fama
entre su gente, que lo vean pelear en México, por lo que está dispuesto a sacrificar parte de su bolsa y convencer a los promotores para que le consigan un pleito en su tierra natal, Guadalajara, o en el Distrito Federal; eso sí, ante uno de los 10 primeros de la clasificación mundial.
Aunque sabe que las bolsas son importantes y ahora como monarca de la división pluma puede imponer ciertas condiciones, en este momento no le preocupa cobrar menos en México de lo que se embolsaría en Estados Unidos –donde radica y siempre ha boxeado–, porque son las ganas de pelear en mi país, ante mi gente, por lo que no me importa tanto el dinero
.
Luego de recibir el cinturón verde-dorado que lo acredita como campeón pluma del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Ábner explicó que buscará convencer a su promotora, Golden Boy –propiedad del mexicanoestadunidente Óscar de la Hoya–, de que desea pelear en México, lo que está seguro no le costará trabajo, quizá antes de hacer la defensa obligatoria de su cetro.
El invicto monarca en 27 contiendas, con 14 triunfos antes del límite, dejó en claro que “a mí me gusta enfrentar a los mejores. Nunca he sido de la idea de que me pongan uno facilito, como le dicen un ‘bulto’ o un ‘escalón’. Que me echen a los mejores, porque para eso me hice boxeador y no para sólo subirme al cuadrilátero con los que me convenga”.
Pelea pendiente
El compromiso que tiene pendiente –espera cumplirlo antes de terminar el año– es la defensa obligatoria ante su compatriota Robinson Castellanos (18-9; 11 nocauts), quien es monarca plata de la misma categoría y organización, porque además se lo merece
, pero agregó que casi cualquiera de los clasificados en este momento son garantía de protagonizar una buena función”.
Monarca gallo, supergallo y ahora pluma, el jalisciense dejó una deuda de orgullo
pendiente en su anterior categoría, por lo que está dispuesto a descender para medirse contra el cubano Guillermo Rigondeaux –radicado en Estados Unidos–, aunque de no hacer realidad su capricho, espera el próximo año conquistar su cuarta corona, y por qué no, pensar en un quinto o sexto campeonato. Todavía me quedan muchos años por delante
, sentenció.
En la misma reunión, el queretano invicto en 27 combates Andrés Jaguarcito Gutiérrez recibió el título plata supergallo del CMB, con la idea de que será el retador oficial de la Copa Mundial de Boxeo –creada por esta misma organización– de quien resulte ganador del cetro, para luego ir por la corona absoluta de la categoría.