La juez federal Edith Alarcón, quien lleva el concurso mercantil del Nuevo Grupo Aeronáutico, pospuso para el próximo martes su resolución en la que habrá de determinar si acepta como válido el convenio concursal que ofreció el conciliador y administrador Gerardo Badín, a partir del cual podrá conocerse si Mexicana de Aviación es rescatada o es declarada en quiebra, informaron fuentes judiciales.

Ayer se esperaba la resolución de la juez Alarcón, pero dado lo voluminoso del expediente de dicho convenio concursal la impartidora de justicia decidió tomarse un par de días más para emitir su resolución.

Trascendió, de acuerdo con fuentes judiciales, que cada empresa que integra el Nuevo Grupo Aeronáutico tiene un nivel de conciliación distinta. Mexicana de Aviación, por ejemplo, alcanzó acuerdos con 51.31 por ciento de sus acreedores, mientras Mexicana Inter llegó a 75.71 por ciento. El porcentaje mínimo de conciliación para alcanzar un convenio concursal es de 50 por ciento.

El convenio concursal es el paso que sigue a la etapa de conciliación en este concurso mercantil, que hasta el momento ha durado 32 meses.

Buena estrategia

La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) podría vetar los convenios concursales que presente el conciliador Gerardo Badín para sacar del concurso mercantil a Mexicana de Aviación, porque en apariencia no hay un inversionista interesado o la juez lo tiene reservado, señaló el abogado de los trabajadores de tierra de Mexicana de Aviación, Joaquín Ortega Esquivel.

Detalló que en este momento los trabajadores están a la espera de que se exhiban los convenios concursales que el conciliador entregó al juzgado decimoprimero de distrito en materia civil, y si más de 50 por ciento de los acreedores se adhieren a ellos serán obligatorios para los que no los hayan aceptado y entonces la juez Edith Alarcón podrá levantar el concurso mercantil.

Sin embargo, advirtió el abogado, ahora el riesgo está en que la SCT puede manifestarse en contra de los convenios, porque al no haber un inversionista definido no habrá condiciones para reactivar la empresa ni a quién entregarle el certificado de operador aéreo (COA) indispensable para toda aerolínea, y que se entrega luego de que la empresa demuestra que tienen capacidad financiera, jurídica, administrativa y técnica para operar.

Explicó que hasta el momento la juez no se ha manifestado sobre si uno de los dos inversionistas que presentó documentos para demostrar que tiene los recursos para sacar a Mexicana del concurso mercantil y reactivarla fue aceptado, o si ninguno cumple los requisitos, incluso se mantiene reservada su identidad aunque las versiones son de que uno de los interesados en Mexicana es Fides y el otro la versión mexicana de Med Atlántica.

La juez se tenía que pronunciarse sobre los inversionistas pero no lo ha hecho porque está a la espera de que la SCT vete los convenios concursales. La estrategia que está siguiendo es buena, porque si la SCT veta los convenios con el argumento de que no hay un inversionista que los haga viables y ella tiene uno que sí, habría otro escenario.

Sin embargo, alertó el abogado, es poco probable que las cosas sean diferentes porque el interés de la SCT es que se cumplan todos los procedimientos legales, pero que Mexicana se vaya a la quiebra.

Señaló que con todas las quitas que haya logrado el conciliador las deudas de Mexicana siguen siendo muy altas incluido un crédito fiscal que no es de Mexicana sino de retenciones que hicieron Bancomext y Banorte, además de que ahora las condiciones son más adversas que hace casi tres años, cuando la empresa entró en crisis.