Seúl, 11 de abril.

Corea del Norte cambió hoy la posición de sus lanzaderas de misiles y efectuó varios movimientos dentro y fuera de sus instalaciones, en preparación de un inminente lanzamiento de uno o varios misiles a modo de prueba, que Corea del Sur está lista a interceptar, informaron fuentes militares de inteligencia sudcoreanas.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llamó a Corea del Norte a detener su actitud agresiva, al tiempo que los ministros de Relaciones Exteriores del Grupo de los 8 condenaron en duros términos a Pyongyang por su desarrollo de armas nucleares y de tecnología de misiles balísticos, y lo amenazaron con sanciones más duras si lanza otro misil.

Las fuerzas armadas norcoreanas instalaron a lo largo de la costa este varias rampas de lanzamiento, una de ellas cargada con dos Musudan de mediano alcance, mientras cuatro o cinco vehículos, que se sospecha son los llamados transportadores electores lanzadores, cambian de sitio a menudo en la provincia de Hamyeong, indicaron las fuentes de Corea del Sur.

Japón también denunció preparativos de Norcorea para el lanzamiento de misiles.

Ante esa eventualidad, el ministro de Defensa de Corea del Sur aseguró que su país está listo para derribarlos con su sistema de misiles Patriot. Seúl considera que las pruebas de misiles podrían llevarse a cabo en torno al aniversario del nacimiento del fundador del país, Kim Il-sung, el 15 de abril, abuelo de Kim Jong-un, líder actual.

Por su parte, el ministro sudcoreano de Unificación, Ryoo Kihl-jae, llamó a Pyongyang al diálogo para resolver de manera inmediata la suspensión de actividades en el complejo industrial binacional de Kaesong.