La cantante pop y su esposo, el rapero Jay-Z, festejaron en la isla su aniversario de bodas
La ley estadunidense prohíbe expresamente las autorizaciones de transacciones financieras para actividades turísticas en Cuba, señalan en carta enviada al Departamento del Tesoro
Lunes 8 de abril de 2013, p. a11
Washington, 7 de abril.
Dos legisladores estadunidenses desean saber si la popular cantante pop Beyoncé y su marido, el rapero Jay-Z, tenían autorización del gobierno para viajar a Cuba, pese al embargo económico sobre la isla.
Los representantes Ileana Ros-Lehtinen y Mario Diaz-Balart, de Florida, enviaron el viernes una carta a Adam Szubin, director de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro, para solicitar información sobre el tipo de permiso que recibió la famosa pareja antes de viajar a Cuba.
“Como usted sabe, la ley estadunidense prohíbe expresamente los permisos de transacciones financieras para ‘actividades turísticas’ en Cuba”, dicen los legisladores en la misiva.
Añaden que estas restricciones están en vigor porque Cuba fue catalogada por el Departamento de Estado como uno de los cuatro países que patrocinan el terrorismo y ostenta uno de los registros más atroces
en materia de derechos humanos.
La industria turística cubana es totalmente controlada por el Estado, por tanto los dólares estadunidenses que se gastan en el turismo cubano financian directamente la maquinaria de opresión que reprime al pueblo cubano
, escribieron Ros-Lehtinen y Diaz-Balart.
Beyoncé y Jay-Z generaron revuelo el jueves al pasear por las calles de La Habana Vieja, donde cientos de cubanos se congregaron espontáneamente a saludarlos.
La pareja, que festejaba en la isla su quinto aniversario de bodas, visitó lugares emblemáticos del Centro Histórico de La Habana, declarado por la Unesco patrimonio de la humanidad en 1982. Ahí se tomaron fotos y conversaron con niños, jóvenes y adultos.
Jay-Z y Beyonce –quien cantó el himno en la toma de posesión del presidente Barack Obama en enero y actuó en el Supertazón en febrero– visitaron la catedral y luego almorzaron en un restaurante cercano.
La noche del miércoles cenaron en La Guarida, uno de los restaurantes más exclusivos de La Habana.
Los estadunidenses tienen prohibido visitar Cuba y gastar dinero en la isla a menos que cuenten con un permiso especial de su gobierno.
No obstante, en 2012 la administración Obama levantó algunas de las restricciones de viaje a Cuba, instituyendo un programa de viajes persona a persona
que exige un estricto itinerario para los viajeros.
Cada visitante debe tener un itinerario completo de actividades educativas, que resulten en interacción significativa entre los viajeros y las personas en Cuba
, señala la guía del Departamento del Tesoro.
Los estadunidenses han conseguido evitar las restricciones de viaje a Cuba al visitar primero un país con vuelos a la isla. Las autoridades de aduanas en Cuba conocen esa práctica y no sellan los pasaportes estadunidenses cuando los turistas pasan por sus puestos de registro.
En la misiva, Ros-Lehtinen y Diaz-Balart señalaron su conexión con una comunidad integrada por muchas pesonas que han sido afectadas de manera profunda por el régimen de los Castro
.
En el comunicado se lee: Las restricciones de viaje son medidas de sentido común, que buscan evitar que los dólares estadunidenses apoyen a un régimen que se opone a los intereses de seguridad de Estados Unidos y que suprimen las libertades básicas como la de expresión, de reunión y de creencias
.