Tras denunciar las tácticas dilatorias de la oposición para dictaminar la iniciativa de Ley de los Derechos de las Personas Jóvenes de la ciudad de México, la diputada Dinorah Pizano Osorio afirmó que las garantías de las y los jóvenes no serán botín político y tampoco están sujetos a negociaciones.

En cuanto al derecho a la salud, resaltó que su iniciativa incluirá la promoción de la salud sexual y reproductiva, el acceso a métodos de anticoncepción, la investigación de males que afectan al sector, la información y prevención contra sobrepeso, obesidad, patrones alimenticios dañinos, alcoholismo, tabaquismo y el uso problemático de sustancias adictivas, además del derecho a la confidencialidad del estado físico y mental.

Respecto de los jóvenes con problemas de adicciones, propondrá el derecho a servicios de atención para prevenir, reducir daños, tratamiento, rehabilitación y reinserción, y que en ningún caso las personas rehabilitadas podrán ser privadas, por esta causa, del acceso a instituciones educativas y laborales.

Agregó que con una ley con los contenidos que propone se beneficiarían más de 2 millones 207 mil 680 jóvenes, de los cuales 49.4 por ciento son mujeres y 50.6 por ciento hombres.

La iniciativa busca resguardar los derechos del sector, y se basa en el trabajo profesional que por cuatro años han realizado diversas organizaciones no gubernamentales.

La perredista subrayó: No permitiremos que se siga posponiendo la dictaminación en comisiones, a cambio de negar derechos sexuales y reproductivos de los jóvenes; la Edad Media quedó atrás, aseguró la también presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la ALDF.

La intención es tener una ley que permita a los jóvenes acceder a la educación, a la participación política efectiva y con acceso al mercado laboral con dignidad, además de a la vivienda, para alcanzar mejores niveles de madurez y autonomía sin cortapisas y lo más pronto posible.

Destacó que según la opinión de las y los jóvenes, la discapacidad y enfermedad, seguidas de la posición económica, color de piel, origen étnico y orientación o preferencias sexuales, y la identidad o expresión de género son las principales causas de discriminación, por ello, su propuesta busca erradicar esa práctica.