Reconoce la gravedad de la crisis en Francia, que duró más de lo previsto
Altos, el déficit y la deuda; se replanteará el cálculo del crecimiento de la economía
Sábado 30 de marzo de 2013, p. 20
París, 29 de marzo.
El déficit y la deuda de Francia se dispararon, revelaron cifras divulgadas el viernes, horas después de que el presidente François Hollande reconoció en una intervención televisada la gravedad de la crisis y en la que señaló que aplicar una política de austeridad es condenar a Europa a la explosión
.
El déficit público en 2012 fue de 4.8 por ciento del producto interno bruto (PIB), reducción desde 5.3 por ciento del año anterior, pero por encima de 4.5 por ciento previsto por el gobierno. Con ello, Francia –la segunda economía de la zona euro– incumple la norma europea de que el déficit no puede superar 3 por ciento del PIB.
La deuda pública siguió en ascenso y en 2012 alcanzó un nuevo récord de 90.2 por ciento del PIB, frente a 89.9 por ciento previsto por el Ejecutivo.
Estas malas cifras fueron divulgadas un día después de que Hollande, en la presidencia desde mayo de 2012, admitió que su gobierno no anticipó que la crisis duraría más de lo previsto
.
Estos indicadores complican la labor del gobierno socialista, que ya abandonó hace un mes la idea de reducir el déficit a 3 por ciento del PIB en 2013, y negocia un plazo suplementario con la Comisión Europea para lograr ese objetivo. Bruselas pide, a cambio, que el déficit público francés se ubique claramente por debajo de 3 por ciento
en 2014.
En una entrevista transmitida por el canal estatal France 2, el presidente explicó por qué renunció a alcanzar el objetivo de reducir el déficit público francés a 3 por ciento del PIB, tal como se comprometió ante sus socios europeos. No alcanzaremos el 3 por ciento porque si aceleramos el ritmo se rompería incluso la esperanza de un retorno al crecimiento
, explicó.
Hollande se dijo en favor del rigor, pero no de la austeridad. Propuso aumentar la cotización para la jubilación y la reducción de subsidios a las familias más acomodadas.
Tengo la obligación de decir a los dirigentes europeos: hoy, prolongar la austeridad es el riesgo de no reducir los déficits y la certeza de tener gobiernos impopulares que los populistas se comerán de un bocado llegado el momento
, agregó.
Que los países europeos estén obligados a ser rigurosos, lo entiendo perfectamente, pero estar en la austeridad, no. La austeridad es condenar Europa a la explosión
, sostuvo.
Algunos economistas critican los efectos nefastos de la austeridad sobre el crecimiento y, por tanto, sobre el empleo. Otros, en cambio, reclaman más esfuerzo y rigor, como el economista Jean-Paul Betbèze, quien considera que la anunciada reducción de gastos del Estado para 2014 no será suficiente
.
Otro indicador divulgado el viernes confirma al pesimismo sobre una recuperación de la economía francesa para 2013: el consumo de los hogares, motor tradicional del crecimiento en Francia, volvió a bajar en febrero 0.2 por ciento, respecto de enero, cuando ya había registrado un retroceso de 0.9 por ciento.
El crecimiento de la economía francesa será casi nulo
en el primer semestre de 2013, según el Instituto Nacional de Estadísticas. El propio gobierno francés anunciará próximamente una nueva previsión de crecimiento para 2013, tras admitir que la anterior, que contemplaba un avance de 0.8 por ciento, ya no es viable.