El equipo de las barras y las estrellas, que dirige el alemán Jurgen Klinsmann, llegó este domingo a la ciudad de México y por la tarde entrenó en las instalaciones de Cruz Azul, en Acoxpa, mientras que este lunes dará rueda de prensa y hará el reconocimiento de la cancha del estadio Azteca, donde el martes enfrentará al Tri.

Frente a Estados Unidos el Tricolor buscará su primera victoria del hexagonal que dará tres boletos y medio a la Concacaf, rumbo a Brasil 2014. El vecino del norte tiene tres puntos luego de sumar una derrota ante Honduras y una victoria frente a Costa Rica, mientras que México empató frente a Jamaica y contra los catrachos.

En este contexto, Klinsmann afirmó: Tenemos mucho respeto por México, pero no les tenemos ningún miedo.

Por su parte, el delantero Hérculez Gómez señaló que a los mexicanos lo que más les duele es perder ante el conjunto estadunidense. El mexicano es una persona muy orgullosa, en el futbol nunca quiere perder y menos contra Estados Unidos, señaló el jugador de Santos.

Recientemente, el atacante, junto al resto de sus compañeros en la selección, consiguió un triunfo histórico en el coloso de Santa Úrsula, cuando derrotaron por la mínima ventaja al Tri, en un encuentro amistoso.

Gómez resaltó que aquel triunfo dio seguridad al cuadro de Klinsmann. Siempre es importante ganar, da confianza, fue algo para la generación, tal vez más para ellos porque nunca habían perdido en el Azteca, y nosotros ganamos en confianza, comentó.

Bajo el mando del alemán, desde julio de 2011, el conjunto estadunidense trata de adaptarse a su sistema de juego, y el delantero Hérculez Gómez ya destaca alguna de sus virtudes. Somos un equipo que complica la vida al rival, resumió.

El plantel estadunidense se acoraza ante los rumores que hablan de un vestidor dividido después de que el seleccionador dejó fuera al capitán Carlos Bocanegra. En la semana Klinsmann dijo que si se habla del tema es buena señal. Muestra que a la gente le importa. Lo tomo como una señal positiva, expuso sereno.

El entrenador argumentó la escasa actividad del defensa en su club, el Racing de Santander de España, como razón principal. Tampoco convocó a los veteranos Landon Donovan ni al portero Tim Howard, y el gafete lo otorgó al atacante Clint Dempsey.

Teníamos que sacar a los jugadores de su zona de confort, probar nuevos métodos, explicó Klinsmann, y remarcó: No tengo mayor problema con eso (las críticas); no estoy aquí para hacer felices a todos, sino para hacer mi trabajo, y este es mi trabajo, puntualizó.