Centro Pro y Fundación Diego Lucero denuncian caso de Pavel Guzmán
Sábado 23 de marzo de 2013, p. 13
Pavel Ulianov Guzmán, hijo de Abdallán Guzmán Cruz –cuya familia denunció al menos cinco desapariciones forzadas en la época de la llamada guerra sucia– fue víctima de intimidaciones, extorsión y malos tratos el pasado domingo, cuando policías del estado de Michoacán lo detuvieron, lo amenazaron con desaparecerlo y le sembraron drogas para inculparlo, denunciaron el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez y la Fundación Diego Lucero.
Dijeron que el pasado día 17 Pavel Guzmán estaba con dos amigos en un sitio aledaño al balneario Cointzio, cuando policías estatales se acercaron y los bajaron de su vehículo con lujo de violencia
, por la supuesta falta administrativa de ingerir bebidas alcohólicas en la vía pública.
Luego de golpearlos y esposarlos –afirmaron–, los agentes intensificaron el tono de sus amenazas al darse cuenta de que Pavel Guzmán trabajaba como asesor en el Congreso de Michoacán.
No sabes en la que te metes. Yo me encargaré personalmente de llamar a todos los medios de comunicación para que te arrepientas de no haberte arreglado conmigo cuando podías. No los vamos a poner a disposición; ahorita van a ver a dónde los vamos a llevar, cabrones: los vamos a desaparecer
, los amenazó el agente estatal.
Luego de sembrar a Guzmán una bolsa con mariguana, que les permitió iniciar una averiguación previa, los agentes lo presentaron ante los medios de comunicación, lo fotografiaron y volvieron a amenazarlo.
Los colectivos de derechos humanos recordaron que Abdallán Guzmán Cruz ha denunciado la desaparición forzada de su padre y cuatro de sus hermanos, cometida por elementos del Ejército Mexicano en la década de los 70.