Viernes 22 de marzo de 2013, p. 40
Sydney. La primer ministra de Australia, Julia Gillard, pidió ayer perdón por la política gubernamental que durante décadas obligó a las madres solteras a dar en adopción a sus hijos. La disculpa se ofreció ante 800 madres y adoptados en el parlamento, donde el gobierno se comprometió a financiar terapias para los afectados. Se calcula que alrededor de 150 mil bebés fueron entregados en adopción a parejas sin hijos en contra de la voluntad de sus madres biológicas entre 1950 y 1970.