Viernes 22 de marzo de 2013, p. 45
Morelia, Mich., 21 de marzo.
Los tres jóvenes del Distrito Federal desaparecidos en Paracho el 22 de julio de 2012 fueron secuestrados, e incluso se pagó medio millón de pesos por uno, pero sus familiares no habían comentado nada para protegerlos, reveló hoy la madre de uno de ellos ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
Parientes de los tres acudieron de nuevo a la PGJE para reclamar a las autoridades que agilicen las investigaciones y reprochar negligencia y desinterés.
Laura Beatriz Castañeda Guerrero, madre de Diego Antonio Maldonado, reveló después de ocho meses que su hijo fue secuestrado junto con sus amigos Ana Belén Sánchez y Luis Enrique Castañeda, un día después de haber impartido un curso de ciencia para niños en la casa de la cultura de Paracho. Se quedaron un día más en ese municipio porque había un festival de globos de Cantoya.
Un cura medió con plagiarios
Días después, los secuestradores se contactaron con los familiares y aceptaron que el sacerdote Juan de Dios Ávila fuera el mediador y entregara el rescate.
Ávila fungió como mediador; él entregó a los plagiarios el rescate. Les dio 500 mil pesos y unos terrenos. Nosotros ya cumplimos, y ahora pedimos que nos devuelvan a los muchachos
, precisó.
El cura, respondió a pregunta expresa, ha oficiado en varias ciudades, entre ellas Uruapan, y actualmente vive en el Distrito Federal, pero ya no lo he vuelto a ver
. Comentó que lo contactó por redes sociales con la novia de su hijo, oriunda de Grecia, a quien le dijo que él sabía dónde estaban los tres jóvenes.
No volvimos a verlos, pero sabemos que la dueña del hotel donde estaban hospedados y el recepcionista saben mucho más de lo que han declarado, por lo que deben ser enjuiciados, ya que ellos cambiaron la escena donde fueron secuestrados
, dijo.
Agregó que el alcalde de Paracho, Nicolás Zalapa, se ha deslindado y no ha ofrecido apoyo alguno a pesar de que los jóvenes fueron invitados por el ayuntamiento. Sospechamos de los policías municipales, porque no actuaron de inmediato, por lo que podrían ser cómplices
.
Castañeda Guerrero pidió al gobernador y al procurador de Justicia del estado, Plácido Torres, que busquen a los tres jóvenes originarios del Distrito Federal como si fueran sus hijos; queremos a nuestros hijos vivos
. Sin embargo, la procuraduría estatal no ha ofrecido resultados.