El investigador de la UNAM es el único mexicano que participa en la misión de la Nasa
El análisis de la composición mineralógica de la muestra y de los compuestos volátiles indica formación de arcillas, producto de la interacción del agua con las rocas ígneas, explicó el experto
Martes 19 de marzo de 2013, p. 2
El robot Curiosity de la misión de la Nasa a Marte recolectó recientemente minerales en la desembocadura de lo que fue un lago y, según su análisis, hay elementos para pensar que hace miles de millones de años pudo haber vida microbiana en ese planeta, pues se detectaron elementos como azufre, nitrógeno, hidrógeno, oxígeno, fósforo y carbón.
Además, el agua de ese sitio tenía un pH neutro o ligeramente alcalino, como la mayoría de los seres vivos de la Tierra la necesitan.
Rafael Navarro, investigador del Instituto de Ciencias Nucleares (ICN) de la Universidad Nacional Autónoma de México y único mexicano que participa en este proyecto de la Nasa, señaló que los hallazgos son muy importantes, ya que son las primeras evidencias de que en Marte pudo existir vida, al menos en el pasado, cuando caudalosos ríos hasta de un metro de profundidad bajaban de las montañas para llenar lagos en los valles.
La zona donde se encontró la muestra de roca analizada no estaba prevista para la exploración en un principio. Sin embargo, el Curiosity siguió el cauce seco de un posible río y llegó a lo que parece ser la desembocadura, en el lecho seco de un lago.
En este lugar, el robot utilizó su taladro para obtener muestras de roca un poco más profundas y revelar así algunas pistas sobre el pasado húmedo del planeta rojo.
Navarro, asesor científico y encargado del análisis de los datos que la nave recoge, comentó que el robot no iba a estudiar esta zona en un principio, pero al descubrir el cauce seco se decidió hacer algunas pruebas.
En información difundida por el ICN, se reveló que el investigador universitario sostuvo que el descubrimiento fue posible gracias a dos herramientas hermanas
: el CheMin, que analiza la composición mineralógica de la roca, y el SAM, con el que colabora Navarro, que estudia los compuestos volátiles de la muestra.
Los resultados complementarios de ambos experimentos indican que en el fondo del lago se depositaron arcillas, que son el producto de la interacción del agua con las rocas ígneas.
El científico universitario subrayó que también son las primeras evidencias que apuntan a que fuera de la Tierra podrían existir condiciones adecuadas para el desarrollo de los seres vivos.
Anuncio de la Nasa
La semana pasada, la Nasa dio a conocer que hace miles de millones de años pudo haber existido vida en Marte. En una conferencia televisada, Michael Meyer, científico jefe del Programa de Exploración de Marte de la agencia espacial, sostuvo que “una pregunta fundamental de esta misión (Curiosity) es si ese planeta pudo haber sido propicio para la vida (…) Por lo que sabemos ahora, la respuesta es sí”.
El equipo de la Nasa que participa en esta misión consideró que se trata de la primera prueba definitiva de la existencia de un entorno propicio para la vida más allá de la Tierra. Los análisis de la materia mineral del planeta rojo continuarán
El Curiosity fue lanzado el 26 de noviembre de 2011 y navegó por el espacio más de ocho meses para amartizar el 6 de agosto del año pasado. Atravesó 566 millones de kilómetros antes de ingresar a la atmósfera marciana.
El robot tiene el tamaño de una camioneta y es capaz de pasar sobre obstáculos de 65 centímetros de altura y de recorrer un máximo de 200 metros diarios, mientras obtiene energía de un isótopo radiactivo. Como no depende de la energía solar, también realiza sus labores durante la noche.
Cuenta con dispositivos que le permiten identificar los minerales presentes en la superficie del planeta vecino, además de tomar fotografías y video de alta definición, así como localizar sitios adecuados para obtener muestras que consigue taladrando el terreno para estudiar capas más profundas de la superficie, a diferencia de las examinadas por misiones anteriores.