Una de las principales aportaciones del grupo Zazhil (claridad, en maya) al medio musical de México, es mantenerse dentro de la línea independiente durante 30 años. Lo celebraremos este domingo 17, en el Teatro de la Ciudad, donde haremos un recorrido por los géneros tradicionales de México, que abarcan todas zonas del país, expresó Enrique Hernández, fundador de este grupo que ha acompañado a numerosos representantes del canto tenaz y auténtico, como Amparo Ochoa, Óscar Chávez y Gabino Palomares.

En entrevista con La Jornada, Hernández agregó que él es el único integrante de los fundadores originales y que, en ese sen-tido, Zazhil ha demostrado su apertura al talento de muchos ejecutantes de instrumentos propios del son, huapango y otros ritmos que sobreviven entre modas, como las que impone lo grupero. Él es un multinstrumentista: toca arpa, guitarras tradicionales, jarana y flautas indígenas, por citar sólo algunos.

Diferentes fusiones

En la charla también participó Ramón Sánchez, ejecutante del sax e instrumentos de cuerdas, además de flautas. Dijo que el concierto comenzará a las seis de la tarde y la idea es que el público se una desde el primer momento haciendo coros, bailando o, simplemente llevando el ritmo con las palmas o con los pies.

Enrique, por su lado, dijo que el trabajo de estos seis lustros les ha sido satisfactorio, por ser una labor independiente. Vivimos de tiempo completo de la música. Abordamos también géneros musicales propios de la ciudad, como el jazz y el blues, lo cual ha permitido mantener el proyecto con diferentes fusiones. El esfuerzo ha valido la pena, porque la gente joven que nos ha visto en vivo sabe que somos un grupo mayor de edad. Ellos se han motivado al escucharnos y algunos han optado por seguir una carrera musical.

Ramón Sánchez destacó: algunos grupos nos consideran como un ejemplo de continuidad y de investigación. Eso es dejar huella en el camino.

Hernández precisó que el estilo de Zazhil se caracteriza por ser directo. “Quienes nos escuchan saben que hay una fusión bien hecha en los arreglos. Hemos mezclado ritmos afroantillanos y de jazz, aunque siempre está presente el sonido acústico de los instrumentos tradicionales.

Criticó la falta de cuidado y desarrollo de las músicas tradicionales por parte de las autoridades. Esto es culpa, en gran medida, de la televisión, que ha mermado las tradiciones musicales, que se defienden y se mantienen por su autenticidad y por su propia fuerza. Otro aspecto es que prevalece el centralismo en materia de cultura y no se conoce lo que existe a escala regional”.

La fiesta por los 30 años de Zazhil será a partir de las seis de la tarde en el Teatro de la Ciudad, en Donceles 36, Centro Histórico.