omo ya se ha vuelto costumbre, lo más sobresaliente del material mexicano visto por uno en el reciente festival de cine de Guadalajara fueron documentales: Miradas múltiples (La máquina loca), de Emilio Maillé, y Quebranto, de Roberto Fiesco.
Estrenado antes en el festival de Morelia, el primero es un hermoso ensayo visual sobre la obra de Gabriel Figueroa, sin duda, el mejor fotógrafo en blanco y negro en la historia del cine mexicano. Además de agrupar temáticamente las diversas escenas fotografiadas por Figueroa en una sensual coreografía de paisajes, rostros y motivos, Maillé entrevista a varios cinefotógrafos de diversas nacionalidades y generaciones para dar su testimonio, no sólo de la admiración que le tienen al trabajo del mexicano, sino también de su propio oficio.
Desde el veterano francés Raoul Coutard hasta el joven mexicano Alexis Zabé, pasando por grandes maestros como el español Javier Aguirresarobe, el brasileño Walter Carvalho, el inglés Anthony Dod Mantle, el también francés Philippe Rousselot y el italiano Vittorio Storaro, entre varios otros, comentan sobre las cualidades de un logro que, ante las condiciones actuales de tecnología fotográfica, sería irrepetible. Algunos de ellos incluso se cuestionan si su trabajo sigue siendo relevante, ahora que cualquier poseedor de un teléfono celular es un fotógrafo en potencia.
Así, Miradas múltiples es, además de un festín visual con las imágenes de un México mitificado por Figueroa y sus directores –El Indio Fernández, sobre todo–, una clase magistral para cualquier cinéfilo interesado en ese delicado oficio de pintar con luz. (Lástima que Maillé no pudo contar en todos los casos con copias impecables para su antología. Algunos de los extractos se ven maltratados por el uso y el tiempo. Lo cual habla de la necesidad apremiante de restaurar las obras primordiales del cine mexicano; ciertamente una inversión más provechosa que la de construir inútiles y costosas obras faraónicas.)
Premiada en el festival, Quebranto también enfoca a un personaje del cine mexicano, pero se va al registro opuesto, a los olvidados o marginados por su precaria condición de extras. La protagonista es una señora que se hace llamar Coral Bonelli. En su infancia, era un niño actor, Fernando García Ortega, apodado Pinolito. Se trata nada menos que del niño que, en el episodio Caridad (de Fe, esperanza y caridad, 1972), se ve involucrado en el pleito que detonará toda la tragedia en ese desgarrador trabajo de Jorge Fons. (Su inseparable madre, Lilia Ortega, también se ha desempeñado como extra).
Consciente desde pequeño de su homosexualidad, Pinolito pasó a ser uno de los jóvenes bailarines del teatro Blanquita. Una vez que optó por la transexualidad, se ha dedicado a la imitación fonomímica de estrellas y, en tiempos difíciles, a la prostitución callejera. Fiesco describe esa singular existencia al explorar las diversas facetas de su personaje con la misma naturalidad. El realismo sólo se interrumpe para dar pie a elaborados números musicales, quizá la única forma en que Coral puede todavía vivir de la fantasía.
Al describir el entorno de Coral, Quebranto es también el retrato de esa ciudad de México de edificios en semirruinas, de rentas congeladas, que vive una contradicción entre la noche y el día; una ciudad que se puede tragar a sus habitantes (el hermano mayor, un mariachi, murió en el terremoto del ‘85), o los deja vivir en un sórdido anonimato.
Es de esperar que ambos documentales gocen pronto de una exhibición fuera del circuito de festivales y no se tarden un par de años, como es la norma, para recibir, como caridad, una limitada exhibición comercial.
Miradas múltiples (La máquina loca)
D y G: Emilio Maillé/ F. en ByN: Diego Rodríguez, Jean Gabriel Leynaud/ M: Michael Nyman/ Ed: Octavio Iturbe/ P: El Caimán, Alebrije Cine y Video, La Femme Endormie. México-España-Francia, 2012.
Quebranto
D: Roberto Fiesco/ G: Julián Hernández, Roberto Fiesco/ F. en C: Mario Guerrero/ M: canciones varias/ Ed: Emilio Arenales Osorio/ P: Mil Nubes-Cine, FOPROCINE, Ruta 66, CUEC, Fonca. México, 2012.
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