Londres, 11 de marzo.

Los residentes de las islas Malvinas votaron en forma abrumadora en favor de seguir bajo dominio de Reino Unido, según los primeros resultados divulgados tras la segunda y última jornada de un referéndum convocado para dejar claro su deseo de seguir siendo un territorio bajo administración británica, consulta descalificada por Argentina.

Al cierre de esta edición se informó que 98.8 por ciento votó por el sí. La participación fue de 92 por ciento de los mil 672 votantes registrados.

La consulta fue convocada por las autoridades de las islas frente a la reivindicación soberanista de Argentina, que denunció el referendo como una maniobra de Londres.

Es una maniobra mediática y dilatoria, sin ningún valor legal; no ha sido convocada ni supervisada por la Organización de las Naciones Unidas, dijo la embajadora argentina en Londres, Alicia Castro, en declaraciones a la radio La Red de Buenos Aires.

Castro advirtió que “es un referendo entre habitantes británicos, convocado por los mismos británicos, para que digan si quieren que el territorio donde viven sea británico.

Respetamos su modo de vida, su identidad. Respetamos que quieran seguir siendo británicos, pero el territorio en el que habitan no lo es, añadió.

Argentina reclama por la vía diplomática la soberanía sobre el citado archipiélago austral, luego que en 1982 se enfrentó en una guerra con el Reino Unido con saldo de 649 argentinos y 255 británicos muertos.

Buenos Aires calificó el domingo este referendo de un sin sentido y afirmó que es un intento británico de manipular la condición del archipiélago situado en el sur del océano Atlántico, Gran Bretaña ocupó las Malvinas, a las que llama Falklands, desde 1833, pero Buenos Aires reclama este archipiélago, al que considera parte del territorio argentino.

Argentina, que se encuentra a 400 kilómetros de distancia del archipiélago, calificó de ilegal este referendo ya que sostiene que los isleños son una población implantada y, por tanto, no tienen el derecho a la autodeterminación.

Por su parte, Londres, situada a más de 13 mil kilómetros de distancia de las disputadas islas, asegura que no discutirá sobre temas de soberanía con Buenos Aires, salvo que fuera el deseo de los isleños.

Los habitantes de las islas Malvinas esperan que el resultado del referendo sirva para enviar un mensaje claro a otras capitales y presionarlas para obtener reconocimiento internacional.

Estados Unidos, por ejemplo, se ha guardado mucho de tomar partido en el contencioso, a pesar de su alianza con el Reino Unido, donde el referendo apenas ocupó espacio en la prensa y pocos periódicos publicaron breves reportajes o fotografías sobre este territorio de ultramar.