Mundo
Ver día anteriorLunes 4 de marzo de 2013Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El operativo contó con apoyo de helicópteros, tanques blindados y mil 500 uniformados

Toma pacífica y rápida de dos complejos de favelas en Río

Redoblan esfuerzos por pacificar la entidad, sede del Mundial de Futbol y Juegos Olímpicos

Foto
Militares buscan a traficantes de droga en el complejo de favelas de Cajú, en Río de JaneiroFoto Xinhua
 
Periódico La Jornada
Lunes 4 de marzo de 2013, p. 24

Río de Janeiro, 3 de marzo.

Más de mil 500 policías y militares con apoyo de carros blindados ocuparon esta madrugada en 25 minutos y sin disparar un tiro las favelas de Cajú y Barreira do Vasco, en poder del narcotráfico y ubicadas en los principales accesos a Río de Janeiro, cerca del aeropuerto internacional y del puerto.

El operativo contó con el apoyo de 17 tanques blindados y varios helicópteros y pudo realizarse de manera pacífica porque la policía cercó las favelas los días previos, lo que llevó a los líderes de los grupos criminales a abandonar el lugar antes de la acción policiaca, dijo el comisario Marcos Vinicius Braga.

A las 4:55 (hora local), apoyados desde el aire por un helicóptero, elementos del batallón de operaciones de la policía militar (Bope) se abrieron paso por estos barrios, que bordean dos grandes autopistas que llevan al centro y a la zona más turística de Río, constató Afp.

Las comunidades fueron recuperadas sin encontrar resistencia, lo que permitió el dominio de los territorios en 25 minutos, indicó el gobierno estatal en un comunicado.

Más de 300 detenidos

La ocupación de las 13 favelas de Cajú, donde viven unas 20 mil personas, es parte de la estrategia iniciada en 2008 por las autoridades para mejorar la seguridad en Río, una de las sedes del Mundial de Futbol en 2014 y que acogerá los Juegos Olímpicos en 2016.

La operación ha sido exitosa, dijo al canal Globo el coronel de la policía militar Frederico Caldas.

Las banderas de Brasil y del estado de Río fueron izadas en la favela Parque Alegría de Cajú, símbolo de la nueva presencia del Estado.

La policía informó que trabajos de inteligencia permitieron el arresto, previo a la ocupación, de 284 personas y 36 menores en la localidad, se incautaron 86 kilos de cocaína, 263 kilos de mariguana así como decenas de fusiles, pistolas y revólveres.

Este domingo 12 personas más fueron detenidas e incautaron 93 kilos de pasta base de cocaína, 300 gramos de mariguana, 39 piedras de crack, 119 frascos de loló, un producto casero a base de éter y cloroformo, y más droga que aún no ha sido contabilizada.

La policía halló también municiones, 28 cargadores de fusil y tres de pistola, una espada artesanal, siete radiotransmisores y un par de chalecos antibalas. Espero que tengamos más seguridad tras la entrada de la policía a esta zona que durante décadas fue feudo de narcos, dijo a Afp una habitante de Cajú de 77 años que no quiso identificarse.

Para el gobernador de Río, Sergio Cabral, la reconquista representa el renacimiento de una región y libera a las comunidades de un poder paralelo.

Unos 200 policías de civil ocuparon de manera simultánea la favela Barreira do Vasco, informó la Secretaría de Seguridad.

Unos 80 funcionarios ya comenzaron a limpiar las calles donde los servicios básicos eran casi inexistentes, y a retirar las barricadas levantadas por narcos antes de la ocupación.

La reconquista de Cajú es un primer paso para ocupar el mayor y violento Complexo da Maré, controlado por bandas enfrentadas del narcotráfico –Comando Vermelho (CV) y Terceiro Comando– y por una milicia parapolicial.

La proximidad con el aeropuerto hace inevitable que el gobierno ocupe esa región; la idea de proteger las vías principales tiene que llevar a la pacificación de Maré, donde viven 75 mil personas, dijo Ignacio Cano, profesor del Laboratorio de la Violencia de la Universidad Federal de Río.

Una Unidad de Policía Pacificadora (UPP), con efectivos entrenados para hacer frente a los problemas de las favelas, debe instalarse en los próximos meses en Cajú.

Actualmente, 30 UPP con más de 8 mil efectivos velan por la seguridad de más de 200 favelas y un millón de habitantes, según la policía.

Para 2014 la meta es tener 40 UPP en las favelas de Río, donde vive un tercio de la población de seis millones de habitantes.

La tasa de homicidios en Río cayó a 10.9 por cada 100 mil habitantes en 2012, contra 36.2 tres años antes, según el estudio Mapa de la Violencia divulgado en diciembre.