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Luis Villa Vargas encabezó la primera mesa redonda del proyecto Hacia dónde va la ciencia

México acumuló conocimiento básico en 30 años años, pero no generó el producto
 
Periódico La Jornada
Martes 26 de febrero de 2013, p. 3

Las comunicaciones, la informática y la computación representan simultáneamente retos y nichos de oportunidad para el desarrollo de la tecnología en México, área que necesita transitar de lo básico a lo aplicado para que pueda convertirse en uno de los pilares del modelo de la innovación en el país.

Requiere además de una política pública actualizada y moderna que propicie su desarrollo y permita la generación de tecnologías y productos de punta.

Las anteriores fueron algunas de las conclusiones a las que llegó la mesa redonda Información y comunicaciones, la cual forma parte del proyecto Hacia dónde va la ciencia en México.

Áreas de oportunidad

El proyecto es una iniciativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, la Academia Mexicana de Ciencias y el Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República, el cual, por medio de unas 60 mesas redondas, en las que participarán alrededor de 300 científicos, académicos, tecnólogos y líderes sectoriales, pretende revisar las tendencias y avances de la ciencia en México.

La mesa redonda, que abrió formalmente las actividades de ese proyecto, tuvo el propósito de plantear las áreas de oportunidad para el desarrollo de la investigación en información y comunicaciones, así como la formación de recursos humanos en México en estas áreas.

Luis Villa Vargas, director del Centro de Investigación en Computación (CIC) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), anfitrión y moderador del acto, sostuvo que en México se vislumbra un nicho de oportunidad en desarrollo de tecnología que tenga que ver con comunicaciones, con inteligencia, como puede ser, por ejemplo, sistemas móviles.

Es necesario seguir trabajando para que en este modelo de innovación se impacte en la cadena (productiva), no hay un solo pilar que resuelva el problema de la innovación; se requiere educación, investigación, desarrollo tecnológico.

Destacó que en el país se tiene el contexto, la oportunidad, la habilidad y el recurso humano para dar el siguiente paso. México en los pasados 30 años hizo acopio de un cúmulo de conocimiento básico, pero no generó la plataforma que lo aterrizara en un producto.

Villa Vargas agregó que una mesa de discusión de donde salen ideas y propuestas no es la solución para definir el rumbo de un país, pero subrayó que en el nicho de tecnologías de información se tienen que tomar decisiones rápidas, porque dichas tecnologías se mueven a gran velocidad.

México está en posibilidades de subirse a ese tren que ya va caminando, pero se tiene que definir una política pública.

Se preguntó por qué en México no hay grupos grandes de investigación que creen tecnología para que a mediano y largo plazos se pueda extraer el petróleo de las aguas profundas del golfo. Mencionó que Brasil sí tiene esa tecnología, la cual creó para un plan de 20 años y ahora la está ofreciendo a los mexicanos.

Concluyó que a nivel macro se sabe adónde se quiere ir como país, pero falta definir el cómo. Uno de los objetivos es empezar a incursionar en esas áreas y comenzar a hablar sobre dispositivos móviles desarrollados en México, por ejemplo.

Sumar áreas humanísticas

Fabian García Nocetti, del Instituto de Investigaciones en Matemáticas Aplicadas y en Sistemas, de la Universidad Nacional Autónoma de México, resaltó que los 10 retos presentados en la Agenda Ciudadana, la tecnología y la innovación son temas específicos que en su gran mayoría requieren del uso de técnicas computacionales a diferentes niveles, junto con la ingeniería y las áreas humanísticas.

Adolfo Guzmán Arenas, del CIC del IPN, quien coordinó la mesa redonda, añadió que desde la perspectiva tecnológica, la información y las comunicaciones pueden apoyar áreas cruciales, como la minería, la seguridad, la educación o el sector salud usando tecnologías computacionales, con lo cual se cubre un amplio espectro, pero que hay infinidad de temas en los que también puede impactar de manera significativa.

En las próximas mesas redondas se abordarán biotecnología, electrónica y robótica, energía, geociencias y petróleo, matemáticas aplicadas, ingeniería y salud.