Víctor Ugalde, presidente de la Sociedad Mexicana de Directores-Realizadores de Obras Audiovisuales, aseguró que 2012 fue un año muy provechoso para el cine mexicano, porque la producción se incrementó y casi alcanzó cien películas filmadas.

En entrevista, Ugalde afirmó que lo anterior habla de un proyecto exitoso de gestión cruzada entre las autoridades del cine, legisladores y realizadores.

El director también aplaudió los apoyos y estímulos fiscales en favor de la cinematografía nacional, como Eficine 226, Fropocine, Fidecine y Eprocine.

Podemos decir que la solución planteada para 2012 fue buena, pero insuficiente, por lo que se tiene que pensar en un proyecto más amplio con reformas que beneficien a más cineastas.

Importante dar certidumbre a cineastas

Apuntó que el modelo de impulso a la cinematografía nacional en los pasados 10 años ya se agotó; es necesario reperfilar los mecanismos de apoyo para dar certidumbre a la comunidad de cineastas, además de que se requiere cambiar la forma de selección de proyectos apoyados y la mejor manera sería por medio de mesas de discusión públicas.

Por esa razón, uno de los puntos a desarrollar en 2013 es replantear cómo se otorgarán los apoyos antes mencionados, cuáles deben ser los montos, sin perder la transparencia ni la democratización, tanto en la producción como en la distribución y exhibición.

Uno de los problemas que sigue enfrentando la cinematografía nacional es la distribución y exhibición, por lo que es necesario aplicar una política pública incluyente, con un programa de exhibición digital a precios populares en por lo menos 500 nuevas plazas que no cuentan con una sala de cine en el país.

Con lo anterior, dijo, se rompería el círculo vicioso, porque sacaríamos a los jóvenes de las cantinas, pues tendrían otra opción de entretenimiento; por otro lado, abatiríamos la piratería, porque siempre es mejor ver una película en una pantalla grande y a precios accesibles, además de que se incrementaría la producción de cine mexicano.

Destacó que una de las tareas para los próximos años será abrir nuevas plazas para la exhibición de cine nacional. Nuestro país tiene posibilidades inmensas, contamos con el mejor mercado de América Latina, lo único que necesitamos son políticas inteligentes.

Ugalde consideró que existen dos tipos de películas mexicanas. El primero son las de asistencia masiva, con buenos resultados en taquilla, como La vida precoz y breve de Sabina Rivas, la cual salió al mercado con 500 copias y en su semana de estreno superó en asistencia a las cintas extranjeras.

Pero hay otro cine, abundó, sale con unas 20 copias, pero tiene un público fiel y cautivo, como Post tenebras lux, de Carlos Reygadas. Lo que necesitamos son dos o tres circuitos de exhibición para diferentes públicos.

Consideró que dar mayor publicidad a las películas mexicanas beneficia a todos: al cine, porque van más espectadores; al distribuidor, porque obtiene más ingresos, y al productor y director porque su trabajo es visto por mayor número de personas.

Dijo que la comunidad cinematográfica mexicana estuvo muy trabajadora y confió en que el ánimo no decaiga a pesar de la incertidumbre que ha generado la reducción presupuestal en materia de cultura que recién aprobó la Cámara de Diputados para 2013.