Jueves 29 de noviembre de 2012, p. 3
Félix Morales Flores, de la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), desarrolla un herbicida menos tóxico, con productos naturales, para combatir hierbas que afectan la agricultura.
De la misma forma que del sauce llorón sale la aspirina
, hay plantas que producen compuestos para sobrevivir, para combatir patógenos, atraer polinizadores o depredadores de insectos dañinos e incluso algunas son herbicidas, como el eucalipto, en cuya cercanía no crece nada.
Según un comunicado, dichas plantas compiten con los cultivos por la luz, el agua y los nutrientes; son hospederos de plagas y enfermedades, y reducen la calidad del producto
; por eso, la sociedad estadunidense de las malezas las define como plantas no deseadas por el hombre.
En el seminario Búsqueda de herbicidas a partir de productos naturales, explicó que de la Croton ciliatoglanduliferus –que crece en Puebla y Guerrero– aisló cuatro compuestos: dos flavonoides (retusin y paquipodol) y dos dipertenos. Del tallo y las hojas saqué el extracto hexánico, del que obtuve dos cristales: retusin y paquipodol. De medio kilogramo del vegetal, si me va bien, obtengo 30 miligramos de estos compuestos
, detalló.
Morales Flores probó su actividad en jitomate, pasto y trébol.
Sus resultados indican que reducen la biomasa en plantas de jitomate, trébol y pasto, aunque no la merman como los herbicidas comerciales
.
El especialista de la UNAM considera que pueden ser buenos candidatos para ser usados con este fin.